Pablo Serrano

CARTA DEL DIRECTOR

Pablo Serrano


Inteligencia natural

28/05/2023

Lo mire por donde lo mire, lo artificial tiene su connotación negativa. Se pueden percibir aristas más favorables (lo más efectivo que puedo sacar de ello tiene que ver con el progreso científico y médico), pero siempre arrastra una idea negativa y desastrosa. Quizás porque entiendo que lo artificial se ha creado para reemplazar lo natural ante la imposibilidad de regenerarlo en su esencia. El «mejor que nuevo», que dicen algunos y que nunca se ha visto demostrado. Me vienen a la cabeza, así de sopetón, esos tejidos artificiales para sustituir lo irreemplazable, y que siempre se ha dicho, nunca serán igual que los naturales.
Y sobre eso ando dándole vueltas estos días que tanto se escucha hablar de la inteligencia artificial. Mi primera deducción como ignorante de la materia es que es algo contradictorio, hasta destructivo… Y además, lo mire por donde lo mire, tampoco trata de suplir algo que ya no se pueda regenerar por sí mismo, sino quiere ir más allá, quiere alcanzar algo intangible que la propia condición humana no podría. ¿Para qué querríamos llegar ahí si desborda a las personas? Nadie me quita de la cabeza que pasarse de rosca puede llevar a la involución, de la que cada vez más, gentes de la cultura vienen advirtiendo reiterativamente. Y les tengo en consideración porque, lo crean o no, son intelectuales en su propia esencia.
Para algunos seré un cerril paleto, y no estaré dejando abrir mi mente a prescripciones de este tiempo, pero me parece que los principios básicos sobre los que han ido educando y formando a esta generación a la que pertenezco son elementales para seguir construyendo una sociedad más avanza y desarrollada, que al final, es lo que todos queremos o deberíamos querer. Cualquier sometimiento a una dictadura oculta e imperceptible puede llevarnos de cabeza a un precipicio.
Así, no puedo por más que defender la inteligencia natural, y abogar por que la artificial, que no la repudio, se quede únicamente para aquellas situaciones en las que la pericia 'analógica' no pueda seguir obrando. 
No sé. Que digo yo, al hilo de que todo esto se ha gestado durante la jornada de reflexión tras la campaña electoral de las municipales –por lo tanto no sé si estaré muy pasado de vueltas–, que hay muchas cosas y muy serias sobre las que reflexionar y preocuparnos, y atendiendo a la sabiduría popular, digamos que estamos llamados a seguir construyendo poco a poco una sociedad próspera, porque así la queremos todos, y siempre controlando cada paso con seguridad, como si de un ejercicio de alpinismo se tratara, asegurando cada movimiento y cada paso. Pero ojo, no lo olvidemos, los alpinistas también sufren percances a pesar de la preparación y del avance de precisión y concienzudo que dan en sus ejercicios. Así que locuras y experimentos, mejor con gaseosa.