Domingo del Prado

Los lunes de Domingo

Domingo del Prado


Manual de la 'Nueva Nochebuena'

21/12/2020

Con mi mejor intención,
y con el fin de aclararos
las dudosas instrucciones
que el Gobierno nos ha dado,
—tan engorrosas, que no hay
por dónde «meterle mano»—,
os ofrezco, en exclusiva,
este «Manual del Usuario»,
pa pasar las navidades
sin rebrotes ni contagios.

Con la venia de don Pedro
y el visto —¡bueno!— de Pablo,
el «sí» de Salva Dorilla
y el «yes» del Simón, Frenando,
parió el BOE este «Manual»
para días tan señalados.
Después de romperse el coco,
y tras varios días currando,
alumbraron estas normas
que aquí mesmo les detallo:

«1.—En el día de Nochebuena
y en la Nochefinald´año
antes de la una y media
habrán de estar acostados,
o al menos, como muy tarde,
hacia las dos menos cuarto.»

«2.—Si usted acude a otra casa,
una vez que ya «ha llegado»,
lo mismo sea familiar
que, simplemente, «allegado»,
a dos metros de distancia
habrá de estar bien sentado
formando una doble uve,
respetando los espacios….
y ha de estar quieto y tranquilo,
bien pegadito al respaldo,
sin levantarse del sitio,
respirando muy despacio…
que es muy traidor este virus
a poco que nos movamos.»

«3.—Allí podrán apiñarse
10 personas como máximo;
y no deberán cantar
desgañitándose, en alto,
ni clásicos villancicos,
ni campanadas, ni cuartos, 
pues en un «do» sostenido
puede el virus dar un salto
y entrar por donde no debe,
sin estar él invitado.
Si sumaren más de 10
entre suegras y cuñados,
habrán de asignar un número
a todos los «candidatos»,
y dejarán pasar solo
a aquel que le haya tocado
el reintegro del cupón
que hace la ONCE a diario.»
«4.— En cuanto a las comilonas,
no podrán quedar muy hartos:
No más de tres langostinos;
centollos, no más de cuatro;
solos dos carabineros; 
los percebes, ni probarlos,
que está la cosa muy chunga,
y debemos apretarnos
bien los cintos y las cintas
hasta… ¡Dios no sabe cuándo!
Turrón, tan solo una pizca,
y a ser posible, del blando,
que los turrones muy duros
los dientes pueden dañarnos,
y está el virus al acecho
si nos pilla desdentados.
No habréis de catar cordero,
ni oler cochinillo asado,
que el  colesterol os sube
más alto que Los Galayos…»

«5.— En cuestión de loterías
tampoco habréis de fiaros:
Si compartís varios décimos,
antes deberéis rociarlos
con ese gel en espray,
dándole por ambos lados;
así morirá el tal virus,
si algún décimo ha «tocado».

«6.— Con tanta juerga y jolgorio,
tampoco habéis de olvidaros
de escuchar al Rey Felipe,
—que es el hijo de Juan Carlos,
y el cuñado del Urdanga,
el que está en Brieva encerrado—.
Su Mensaje Navideño
que suelta todos los años,
con devoción y respeto
hemos siempre de tragarlo,
que no ha de haber una cena
en que falte dicho plato.»

Qué  bien nos cuida el Gobierno,
por nosotros preocupado:
—Pedro y Pá, desde Moncloa,
solo os aconsejamos…
¡y que cada autonomía
haga de su capa un sayo!
Si respetamos las «normas»
d´estos políticos santos,
junto a sus muchos expertos
que el celebro han estrujado,
lograremos ser felices
en los días tan señalados
de la «Nueva Nochebuena»
y del «Nuevo Nuevo Año».
Tengan muy FELICES FIESTAS,

y con el virus… ¡cuidado!