José Ignacio Dávila

Pensando

José Ignacio Dávila


Economía parda

16/09/2022

Nuestro diccionario de la Lengua española, nos dice que la economía es administración eficaz y razonable de los bienes; conjunto de bienes y actividades que integran la riqueza de una colectividad o un individuo. La gramática parda de la experiencia nos señala la importancia de llegar a fin de mes, sin que la inflación desinfle el colchón de los ahorros para que la vida siga siendo tranquila cuando los años van dejando las canas, la experiencia para tener las ideas claras en cuanto a las cosas necesarias para seguir tirando, en función de los ahorros mantenidos en reserva, sin olvidar las llamadas a la prudencia en la reducción de gastos anunciados o previstos, ajustando la pensión para la contención o adecuada distribución de recursos materiales.
La realidad de las lecciones de la experiencia universal de los años sumados, llaman a la real presencia del Estado Social en su dimensión de la economía interna, el estudio de la realidad y la puesta en marcha de soluciones para la necesaria tranquilidad económica del fin de mes en familia, cuando las fuerzas ya son ajustadas para equilibrar el tiempo pasado con el día convivencia social por vivir acompañado sin soledades inciertas; y con un futuro vital tranquilo gracias al buen hacer las cosas de la vida fáciles, con esa ciencia que estudia los métodos más eficaces para satisfacer las necesidades humanas materiales mediante el empleo de bienes escasos, que en la acción política se tiene que conocer bien, ya que con las cosas del comer no se juega, según la sabiduría popular. 
Cuando las cosas se van de madre en cosas de impuestos, cargas, gravámenes y demás, la presencia del Estado Social en una democracia libre y representativa como así lo es la nuestra, nos enseña que todos los ciudadanos soberanos estamos imbricados en el tejado constitucional que nos protege de los chaparrones, inclemencias y situaciones jorobadas; a) en una sociedad libre, de economía de mercado (Artículo 38 de la Constitución: Se reconoce la libertad de empresa en el marco de la economía de mercado. Los poderes públicos garantizan y protegen su ejercicio y la defensa de la productividad, de acuerdo con las exigencias de la economía general y, en su caso, de la planificación), b) en la que los principios rectores de la política social y económica imponen asegurar la protección social, económica y jurídica de la familia (artículo 39.1 de la constitución, que si lo leen engancha con los siguientes, ya lo verán; c) sumen su opinión, que es necesaria para sumar y organizar la convivencia; d) para salir adelante entre todos, ya que desunidos nos debilitamos y llegar a fin de mes en casa y familia es patrimonio de todos los ciudadanos soberanos.
Nuestro sabio diccionario español, nos dice que la economía del bienestar es la que tiene como objetivo global extender a todos los sectores sociales los servicios y medios fundamentales para una vida digna. Se puede opinar en orden a la respuesta necesaria para superar los problemas cuando la actividad económica recibe los golpes de las crisis, que no distinguen al fin de mes golpeando a todos. Son momentos en que los problemas están y es necesaria la suma de toda la acción política y constitucional en estas cosas de la economía nacional, libertad de empresa en el marco de nuestra economía de mercado y dar solución a la política de la colaboración y respuesta a la acción económica con soluciones reales, en nuestra Unión Europea y Nación. El papel todo lo soporta y nuestra economía constitucional va de la mano con la realidad común a todas las comunidades; ante la defensa de nuestra opción social por la convivencia en libertad solidaria, sin fronteras ideológicas que estorben para salir adelante y conseguir contar con la capacidad y fuerza emprendedora que tiene nuestra tierra abulense, por castellana en suma, el diccionario de la nuestra lengua, nos ha venido demostrando que bajo las reglas de la libertad económica constitucional, sin topes ideológicas a la fuerza social emprendedora, se es  capaz de salir adelante, para poder llegar a fin de mes, aprovechar la experiencia para crear empleo, y volver los hijos a la ciudad y pueblo, sumar recuperar sus experiencias con todos nosotros. Los ideales en temas de economía requieren su aplicación práctica, poner en marcha las cosas que funcionan y no hacer discursos en las nubes políticas, sino en soluciones reales para el empleo y compromiso con la economía de nuestra tierra real, gramática parda, no de papel.