Juan Manuel Pérez

ENTRE HOY Y MAÑANA

Juan Manuel Pérez

Periodista


2050 y 1521

22/05/2021

En lugar de decirnos qué quiere que sea de nosotros en 2050, Pedro Sánchez nos podría haber adelantado si el Madrid ganará la Liga esta tarde o si mañana subirá el Burgos a Segunda. Puestos a pedir, a servidor le habría venido bien tener certezas sobre el tiempo de este sábado; celebramos la Comunión de Cristina y no sé si tendré que ponerme una camiseta interior para no pasar frío con el traje. Pero no, Pedro e Iván son más de hacer planes para dentro de tres décadas, cuando España será verde, feminista, resiliente,...ya saben por donde voy. Llevamos unos años de dinastía sanchista y ya conocemos al personaje. Tiene la más alta consideración de sí mismo y una capacidad innata de tapar los problemas actuales con propaganda futura. Por qué perder el tiempo en conflictos migratorios-diplomáticos con nuestro vecino marroquí, a quién le importa que el nuevo presidente de la Generalitat se marque como propósito culminar la independencia esta legislatura, qué era eso de una pandemia y del propósito de tener inmunizada al 70% de la población en verano... Minucias, frente a esa España de 2050, tan vegana...y resiliente.
Es cierto que no ha sido Sánchez el inventor de los discursos vacíos. Él es un alumno aventajado pero son muchos los políticos que dicen lo que saben pero no saben lo que dicen, que diría mi padre. Tengo grabada una frase del presidente de la Junta de esta misma semana: «La llama comunera sigue muy viva y se proyecta». Y no lo ha dicho cantando o haciendo los coros al Nuevo Mester de Juglaría. Alfonso Fernández Mañueco se imbuía del espíritu de Bravo, Padilla y Maldonado en la inauguración de un congreso internacional sobre el V Centenario de la revuelta.
Uno, Sánchez, viaja al futuro para esquivar el presente. Otro, Alfonso, viaja al pasado en busca de referentes. No sé qué es peor.