Cuando prácticamente no se habla de otra cosa en España que no sea la fuerte ola de calor que azota la península de forma inusual a mediados de junio, con temperaturas muy elevadas, se ha comprobado oficialmente en la ciudad de Ávila que durante los últimos siete días hemos registrado máximas superando con creces los 31º, con picos por encima de los 35º los días 14 y 15, y temperaturas mínimas que no bajaron de los 20º durante las madrugadas de las jornadas del domingo, lunes y martes últimos. Por no hablar con mucho detalle del Valle del Tiétar donde, siendo la comarca más calurosa de Castilla y León, los habitantes de Candeleda han sufrido temperaturas por encima de los 40º a la sombra casi todos los días de la última semana, llegando a 41,7º el pasado miércoles.
Pintado este panorama típicamente veraniego a finales de la actual primavera, hemos podido comprobar que después de un largo período de setenta años, controlados meteorológicamente en la ciudad de Ávila desde 1953, primero en el Ayuntamiento y luego en el actual observatorio de la avenida de Juan Carlos I, la temperatura más alta sigue siendo de 36,9º el 29 de junio de 2019. Hasta 1982, ya en Las Hervencias, la ciudad de Ávila no había superado nunca los 33,4º del 21 de junio de 1960, de acuerdo con los controles. Ya en plena temporada estival, veremos lo que ocurre en julio cuando tenemos en nuestra capital una máxima histórica de 37,6º controlada el día 24 de 1995.
A punto a cambiar, pues, de estación y como ya adelantamos a finales de mayo, algunas de las principales festividades de la Iglesia Católica se han retrasado este año hasta el presente mes de junio y, entre ellas, el Corpus Christi, que se celebrará el próximo domingo 19, excepto en Nava de Arévalo, donde se sigue manteniendo la tradición de celebrarlo el jueves anterior, lo que ocurrió ayer, al igual que se hizo en gran parte del centro y sur de España.
Pero son otras muchas las localidades de nuestra provincia que se disponen a celebrar la festividad de sus respectivos patronos durante la última quincena de junio, destacando las que recuerdan la natividad de San Juan Bautista cada 24 del mes, pero con la especial circunstancia de retrasarse este año al sábado 25 para que no coincida con la festividad del Sagrado Corazón. Se trata de una larga relación que disfrutará pues de un puente presumiblemente muy caluroso, como ocurrirá en Hurtumpascual, Viñegra de Moraña, Blacha (La Torre), Cabañas (Riofrío), Crespos, Diego del Carpio, Hoyos del Collado, Maello, Muñosancho, Narros del Castillo, Navacepedilla de Corneja, Navadijos, Pozanco, San Bartolomé de Corneja, Navacepeda de Tormes (San Juan de Gredos), La Herguijuela (San Juan de Gredos), San Juan de la Encinilla, San Juan del Molinillo, Solana de Ávila, Tormellas y Pajares de Adaja.
Los últimos pueblos en celebrar sus fiestas de junio serán Sinlabajos, por su patrón San Pelayo, el día 26, Costanzana al día siguiente, festividad de Nuestra Señora del Perpetuo Socollo, y quienes tienen a San Pedro o San Pablo por patrones, cuya festividad es siempre el día 29, como ocurrirá en Guisando, Narrillos del Rebollar, Noharre (Nava de Arévalo), Ortigosa de Tormes (Navalperal de Tormes) y San Pedro del Arroyo.
Y cerramos acontecimientos significativos del mes de junio, con la clausura de la exposición La Gloria de Ávila, dedicada a la singular obra de Enrique Larreta titulada La Gloria de Don Ramiro, que después de casi dos meses en el torreón de Crecente, sede de la Diputación Provincial, cerrará sus puertas el 1 de julio. Se trata de rendir homenaje al autor y su obra, iniciada en diciembre de 1903 y entregada a la imprenta el 24 de julio de 1908, con el espectacular palacio abulense como escenario principal de tan singular, por entonces residencia del conde de Crecente, Gabriel del Alcázar y Guzmán, fallecido en París en 1907 y sepultado en la Catedral de Ávila en 1921.