Sara Escudero

Desde la muralla

Sara Escudero


Ganar o perder, esa es la cuestión

06/05/2023

Lo vi en uno de los videos que aparecen por casualidad en las redes sociales. Salen automáticos y supongo que basados en nuestras búsquedas anteriores. En ese control que tienen las redes sobre nosotras. En este chequeo constante de dónde estamos, qué hacemos y qué nos gusta. 
En aquel video, aparecía un deportista hablando tras una pregunta sobre un fracaso de temporada. La verdad es que la respuesta se resumía en que no ganar siempre, es un fracaso.  Desde el punto de vista de la que visualiza el video, es una respuesta más que acertada. Porque al final del camino, la batalla la gana quién fue derrotado muchas veces, pero siempre se levantó para luchar contra sí mismo. No sólo los que, llegando en primera posición, levantando una copa o alzando una medalla colgada al cuello se alzan con una victoria.
Fracasos, aciertos y errores, están hoy al orden del día en las noticias. Y solo gana quien sube al pódium o quien cuenta la historia de tal manera para que unos se sientan ganadores y otros, digamos que humillados.
En estos días, donde en tres jornadas celebraremos el día de Europa, tengo la sensación de no saber quién gana o quien se siente vencido. En un segundo año de celebración, sabiendo que tenemos una guerra en la frontera, un país desquebrajado en Sudán y una larga lista de decálogos que pudieron ser y no fueron, me vienen a la cabeza los principios y valores comunes que todos debemos promulgar en la UE: libertad, democracia, igualdad y Estado de Derecho, y fomento de la paz y la estabilidad.
En estos días complejos, donde compartimos el día grande de la Unión Europea (UE) con el día de la Victoria en muchos países soviéticos, entre otros Rusia, por ser la celebración del Día de la Victoria de la Unión Soviética sobre la Alemania el  9 de mayo de 1945 en la Segunda Guerra Mundial, sigo preguntándome dónde quedan en la historia los ganadores y los vencidos.
Ganar o perder, he ahí la situación. Ser o no ser, esa es la cuestión. En el deporte pierde o fracasa quien no entrena, no hace lo suficiente, no rompe la barrera de lo que parece imposible. Pero en la vida, en la vida perdemos los que no podemos conseguir los objetivos marcados por la UE de contribuir a la paz y la seguridad y al desarrollo sostenible del planeta. Los que no supimos contribuir a la solidaridad y el respeto mutuo entre los pueblos, el comercio libre y justo, la erradicación de la pobreza y la protección de los derechos humanos; los que, aun conociéndole, no priorizamos el respeto del Derecho internacional. 
No se puede quedar en tablas, como en una partida de Ajedrez. Aquí solo hay una cara de una moneda. Y esta vez, siempre sale «pierdes». Porque perdemos como humanidad, en este momento de la historia que nos condenará para siempre. Perdemos los que sufrimos por la injusticia social de unos cuantos, los que viven a los pies de una guerra. Unos pierden la infancia, otros los seres más queridos, otros el vínculo material, otros, incluso la vida. Ganar o perder, en esta Europa del viejo continente, en esta historia que nos ha tocado vivir.
Si el periodista de mi video en vez de preguntar al jugador de baloncesto, preguntara si nuestra vida es un fracaso, posiblemente tendría otra pregunta en la recámara y quizá preguntaría sobre el tiempo cualquier pregunta vana. Porque lo que realmente es un fracaso, es no saber defender la empatía, los derechos y las libertades. Fracaso es rendirse sin saber que hay mucha vida detrás de estas letras que merecen la pena ser vividas. Ganar será plantarle cara a la vida, no dejar que las cosas sean indiferentes, ver el video que mandan las redes sociales y sacar de este aprendizaje, las lecciones de la vida. Ganar es siempre la opción, pero sin dejar a nadie atrás.