Cual notario d´este sitio
que tiene grande muralla,
voy a relatar a ustedes,
con mucha parafernalia
los sucesos y ocurridos
que hubo en Semana Santa.
De procesiones, ninguna,
que estaban todas vedadas,
que hasta el gallo de San Pedro
esta vez, ni una vez canta,
y el burro que salía en Ramos,
y entre olés, a Dios portaba,
no salió, que estaba débil,
pues no le dieron cebada…
¡pero el Covid Diez y Nueve
nos hizo otra vez «la pascua»!
Mas, como en esta ciudad
casi nunca pasa nada,
me veo obligado a contaros
lo que pasó por La Hispania:

Como en otras ocasiones,
en política, «la casta»
sigue dando la torrija,
sigue dando la tabarra,
y a conquistar Los Madriles
sin contemplación se lanza:
Según las grandes encuestas
que Tezanos cocinara,
primero va Doña Yuso
con mil metros de ventaja,
buscando la mayoría
para mejor gobernalla.
Luego, el tan serio y profundo
que Gabi El Hondo se llama,
a quien castañas del fuego
el presi Pedro le saca.
Detrás viene el Herre Jón,
con la su reja afilada,
que si un poco te descuidas,
al instante te la clava,
y te dice: — «¡Vete al médico»
que yo creo que está de guardia!
Luego vienen los de Vox,
quienes más alto vocearan,
y si vocean en Vallecas
nos los muelen a pedradas;
detrás d´ellos, el Ermitas,
el que La Moncloa dejara,
por ver si por Los Madriles
sacaba mejor tajada,
que del chalé, la hipoteca
hay que ayudar a pagarla. 
Y al final, El Mundo Bal,
ciudadano de Arrimadas,
que es el farolillo rojo,
o mejor dicho, naranja.
Allí siguen, enfrascados,
en políticas batallas…
Entre medias, don Simón,
por enésima mañana,
entre muecas y entre risas
nos anuncia, por la cara:
—Aquí está la cuarta «olita»,
tengan cuidado y cuidada,
que no os pille en pelotas,
sin bañador, en la playa.

Mientras, rezando a  Bruselas,
con muy devotas plegarias,
sigue pidiendo vacunas
la ministra doña Darias;
y las que ayer nos ponían,
masivamente, a mansalva,
con filosófico nombre
de Astra-Séneca llamadas,
con nocturna alevosía
al día siguiente anulaban
que ni la OMS ni la EMA
ni la JotaCyL se aclaran.
¡Ay! ¿Q´harán con las personas
qu´estamos ya vacunadas?
¿nos des-inocularán?
¿nos desvacunan mañana?

Entre que nos desvacunan
y la cuarta «olita» avanza,
en un buen lío con los jueces
sigue enfrascado Mar Laska.

En Castiella y en Llión,
como si nada pasara,
siguen Igea y don Mañueco
durmiendo en la misma cama,
y sigue con la ilusión
de gobernar, don Tú D’anca;
y, humilde, doña Verónica,
la que con nadie se casa,
detiene tales vacunas
diciendo: —¡Quietos, ya basta,
que n’ostoy yo mu segura
de si «la Séneca» es válida!

Y ahora vamos con los temas
que más preocupan y alarman
a millones de españoles
que siguen la tonta caja:
«En fútbol, los colchoneros
han perdido la ventaja
y echándole los alientos
tienen ya al MadrÍ y al Barça.»
«El hijo de la Pantoja
a su madre le «dispara»
y, por fin, la Rociíto
la marimorena arma,
y, la probe, tiene en vilo
y atontada a media Hispania.»
Si otros temas no preocupan…

¡Lector, «vámonos… y apaga»!
Así que… ¡Hasta la próxima,
dentro de un par de semanas!