Francisco I. Pérez de Pablo

Doble click

Francisco I. Pérez de Pablo


El beso de Judas

16/03/2021

No habrá Semana Santa, pero sí habrá moción de censura regional. La Santa Cena, la Prendición –grupo escultórico con Jesús entregado por Judas en el huerto de Getsemaní– o La Caída son pasos del Patronato de la Santa Vera Cruz que recorren las calles de Ávila cada Semana Santa. Copias de sendos pasos del escultor murciando Salzillo para la Semana Santa murciana, allí  donde comenzó  un inesperado vía crucis político que acabará en crucifixión sin resurrección de C’s. 
La aventurada moción de censura presentada por el PSOE en Castilla, tiene en Ávila un elevado punto de interés. El voto del Procurador –Pascual– de la formación Por Avila (XAV) se reparte entre necesario e imprescindible o en meramente superfluo e inútil. La posición y el voto que adopte la formación amarilla va a marcar un antes y un después en la legislatura local. A XAV se le ha presentado una ocasión inesperada sin la cual la calamitosa gestión municipal se llevaría por delante el crédito que consiguiera en las urnas hace dos años.
XAV no tiene una ideología definida, ni una estrategia marcada. Surgió de un cabreo generador de incertidumbres y abrió las puertas al populismo. Mientras el alcalde de la capital pedía hace días la apertura de la frontera con Madrid, el rrocurador regional de la formación el mismo día pedía mantener los cierres perimetrales. Este inédito escenario regional va a dejar al descubierto si los intereses perseguidos por el alcalde, el de la propia formación y el del procurador son los mismos. 
El procurador XAV ha expresado su deseo de dar el voto al que más dé para Ávila. Es sugerente o un simple velo la utopía  «el que dé más» ya que la dimensión de ese más puede ser insaciable o convertirse en nada. Al margen de lo que depare la negociación parece que tanto PP como PSOE tendrán que rellenar ese más. Si quien da más es el PP regional, claudicará –a costa del PP de Avila– ante XAV y le garantizará un inmerecido fructífero final de la legislatura local y le abrirá las puertas para una posible reelección en la próxima o un perdón para regresar a las filas populares.
Si por el contrario es el PSOE el que da más, XAV conseguirá un objetivo primordial  que es echar de las instituciones regionales al antiguo partido de la mayoría de sus escindidos componentes y que tanto mal ha causado como vienen proclamando cada vez que tienen oportunidad. Esta vendetta pudiera ser la más deseada por XAV y de paso conseguir un proyecto nacional financiado y una oposición local socialista menos incisiva y despreocupada.
Mañueco ha hablado repetida e insistentemente con el alcalde Cabrera y Tudanca con Pascual. Cabrera y Pascual son escindidos afiliados del PP abulense. Este envite político no es ajeno al edil capitalino pues entre 2015 y 2019 protagonizó en el seno de su propia formación un simulacro de confianza y sufrió una aceptada moción de censura en la Diputación Provincial. En esto acumula experiencia y puede querer enseñar a unos y otros.
La moción de censura va a exigir interna y externamente que XAV se pronuncie públicamente. Toca tomar partido pues abstenerse no vale ya que sería una opción miedosa, transmitiría inestabilidad y contradicción con la base de su nueva política centrada en criminalizar y cambiar las políticas del PP. Si la moción no triunfa, PP absorberá a C’s  y entonces la censura se puede trasladar a la coalición local XAV-C’s. Muchos besos, varios Judas y tiempo de torrijas.