Un hasta luego con música de clarinete

E.Carretero
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Los 60 alumnos del Curso Julián Menéndez, que se celebra cada verano en la capital abulense desde hace 23 años, concluyeron este lunes con un concierto de clausura una formación que es «referente internacional»

Con música, como no podía ser de otro modo, se despidieron este lunes de Ávila los alumnos del XXIII Curso de Clarinete Julián Menéndez, actividad formativa que rinde homenaje a uno de los clarinetistas y compositores más importantes que ha dado este país y que desde sus orígenes recalara cada verano en la capital abulense. Y también con «un balance positivo» no solo porque el cupo de plazas se llenó de nuevo en esta edición, dejando incluso gente fuera por falta de plazas, sino «por la calidad de los participantes, que ha sido muy buena», reconocía Manuel Fernández, director de este curso, antes de la clausura.  
Un total de 60 alumnos, procedentes de tres continentes, y un claustro integrado por una docena de profesores, entre ellos expertos llegados de Japón y Estados Unidos, entre otros, han dado vida este año a este curso que se ha convertido en «un referente mundial», siendo de hecho el «curso de clarinete más importante que con esta estructura se hace en el mundo», como aseguró Fernández, promotor de esta iniciativa que se celebra en la capital abulense desde sus inicios gracias al vínculo familiar que con esta ciudad tiene el director del curso. «Encontramos un sitio idóneo para su celebración, como es el Colegio Diocesano, donde los alumnos duermen, comen, estudian, actúan y asisten a clase», rememoró Fernández el origen de esta iniciativa que sigue ligada a este colegio concertado donde alumnos y profesores conviven durante una semana en una auténtica inmersión musical.

Además de la tradicional entrega de diplomas la clausura también contó con un concierto en el que los alumnos pudieron demostrar lo aprendido durante estos días en la capital abulense.