El obispo de Ávila, José María Gil Tamayo, ha vuelto a reunirse con los secretarios generales de UGT, Comisiones Obreras y USO en la provincia de Ávila, que respectivamente son Javier García, Óscar García y Juan Vázquez, junto a los que también asistieron al encuentro Cecilio Jiménez, delegado de Pastoral Social y Caritativa de la Diócesis de Ávila, Francisco Jiménez, director del Secretariado de Pastoral del Trabajo de la misma, así como Antonio Gallardo, militante de la Hermandad Obrera de Acción Católica. 

La reunión, que ya se celebró en otras dos ocasiones anteriores, se desarrolló «con gran cordialidad, como en las ocasiones precedentes», según destaca el Obispado de Ávila a través de una nota de prensa en la que informó de que en el encuentro  «se habló con total franqueza sobre la situación económica, social y laboral de la provincia de Ávila, situación actualmente condicionada por la pandemia y por la guerra provocada por la invasión rusa de Ucrania».

En este diálogo entre la Iglesia y el mundo del trabajo «se constató una coincidencia muy amplia en los análisis» realizados de los diferentes temas abordados por ambas partes. De hecho, tanto el obispo de Ávila, José María Gil Tamayo, como los representantes sindicales «manifestaron su preocupación por la polarización imperante en el ámbito político, que tanto dificulta dialogar y llegar a acuerdos útiles para el bien común de toda la sociedad». En contra precisamente de esa polarización dominante en el ámbito político se puso el ejemplo de «la patronal y los sindicatos», que a través del llamado Diálogo Social, «han demostrado, en bastantes ocasiones, ser capaces de negociar y llegar a acuerdos buscando más las coincidencias que no las divergencias».

reforma laboral y otros. En el transcurso de la reunión, la representación sindical compartió su valoración sobre los efectos que está teniendo la reforma laboral y que está percibiéndose ya en sus primeros meses de aplicación. «Según sus propios datos, en tres meses la temporalidad en los contratos se ha reducido del 90% al 69%», apunta el Obispado en su nota de prensa.

Por su parte, el obispo de Ávila quiso hacerles partícipes de los datos que avalan la actividad que lleva a cabo el albergue de Cáritas, «entre otras cuestiones para poner de relieve las dimensiones de la pobreza y el riesgo de su cronificación en Ávila».

Al término del encuentro, los representantes sindicales expresaron su gratitud al Obispo de Ávila por su interés, mientras que José María Gil Tamayo les agradeció su disponibilidad al diálogo.