El Colegios Diocesanos UCAV estrenó la temporada 2021-22 con una derrota de esas que duelen por el cuándo, en el descuento y tras un partido muy trabajado y trabado en Los Dominicos, un césped siempre complicado pero en el que los de José Alberto Fernández Somoza hicieron méritos suficientes para regresar a casa, al menos, con el empate con el que el partido alcanzó un largo descuento en el que Esaú, un veterano que se las sabe todas, hacía el 1-0.Ya era inamovible. Un partido en el que Somoza ‘apostó’ por los nuevos. Primer partido oficial y en el once titular se vieron a Javi Hernández en portería, Ruba junto a Oli en el centro de la zaga o Aitor en punta de lanza.
Mal inicio para el Colegios Diocesanos UCAVen una temporada en la que, de seguirse el guión visto en Los Dominicos, será muy igualada.Los detalles pueden ser decisivos.
Se citaron sobre un césped muy seco ambos equipos. No lo tuvieron fácil. Quiso más el once virginiano en estos primeros minutos frente a un Diocesanos que se encomendó desde el primer momento a los balones largos y las segundas opciones generadas por Aitor. El espigado delantero ejerció de referencia, boya y oasis en la salida de los suyos. Fue el primero en iniciar la presión y en proteger la pelota para dar respiro a sus compañeros. En el otro bando, los de Nanín pronto pudieron inaugurar el marcador con un centro de Matos desde el costado que remató Visa sin encontrar la dirección esperada. Poco después Varillas recogió el rechace de un córner para probar los reflejos de Javi Hernández, que se lanzó al vuelo para impedir el 1-0 en el marcador.
Él último cuarto de hora del primer acto creció un bloque que pecó de falta de ambición e ideas a la hora de poner en jaque a una defensa que se encontró muy cómoda. Y es que el cuadro verdiblanco, plagado de futbolistas de gran envergadura, no encontró mayores dificultades a la hora de frenar la propuesta colegial de fútbol directo y aéreo.
Ya en la segunda mitad continuó un decorado muy similar en el que, además, los protagonistas notaron el cansancio de la pretemporada y la falta de ritmo. La Virgen del Camino trató de morder con una presión alta que adelantó sus líneas e introdujo en el campo a futbolistas más verticales. Encontró Nanín lo que buscaba con el cambio de piezas en un equipo que, sin contar con opciones claras de marcar, goteó llegadas gracias a dos laterales muy profundos. Varillas en la derecha y Guti en la izquierda fueron dos puñales que inquietaron a la defensa visitante. En una de ellas pudo Mario Visa firmar el 1-0 de no mediar de nuevo una buena parada por parte de Javi Hernández. El portero abulense firmó un estreno brillante siendo uno de los jugadores más destacados en su conjunto. También lució Encinar en la medular, acumulando kilómetros y acciones de calidad tanto en defensa como en ataque.
Sin mayores sustos discurrieron los noventa minutos hasta el añadido. Quizá por aquello de bajar la guardia después del esfuerzo, quizá por la insistencia local, el partido se rompió cuando menos se esperaba. Lo hizo en una de las acciones marca de la casa y de la que, a buen seguro advirtió Somoza a los suyos. Un saque de banda al corazón del área que prolongó Fran y remachó Esaú para dejar los tres puntos en casa.