Cada verano se ve como hay municipios de la provincia de Ávila que tienen que ser abastecidos por agua ya sea en forma de botellas o con cisternas tras los problemas detectados en cuanto al agua potable. Y en esta labor la Diputación resulta esencial para llevar el control de las necesidades y las gestiones necesarias.

Los datos en la actualidad en cuanto a la provincia de Ávila indican que son cinco las localidades donde es necesario llevar agua para satisfacer las necesidades de este bien básico, lo que además se está haciendo con cisternas. En este caso, las localidades actuales son las mismas que las de la semana pasada y hay que tener en cuenta la influencia de los incendios y cómo están afectando.

Narros del Castillo, Mesegar de Corneja, Narrillos del Álamo, Lanzahíta y Mombeltrán para su anejo La Higuera son las localidades donde los vecinos reciben ahora el agua a través de cisternas. En los casos de Lanzahíta y el anejo del Mombeltrán, no es por un problema estructural ni general sino por las consecuencias del incendio sufrido.

No es el único caso que se ha producido este verano por esta circunstancia porque recientemente se vio como El Hoyo de Pinares, localidad gravemente afectada por el fue que comenzó en Cebreros el 16 de julio, tuvo que recibir agua embotellada para garantizar el abastecimiento de agua a los vecinos después de que las llamas llegarán al espacio de la potabilizadora y obligaran al Ayuntamiento a hacer una serie de actuaciones. Actuaciones que aún hay que completar y que incluso llevan a plantearse que a medio plazo, si llueve y hay arrastre de cenizas, sea necesario de nuevo necesario asum