Una inofensiva iniciativa parlamentaria sobre los centros de educación especial provocó ayer la primera ruptura de la disciplina de voto dentro de las filas de Vox en las Cortes autonómicas. La procuradora de la formación de Santiago Abascal, María Luisa Calvo votó con la oposición una iniciativa de Francisco Igea (Ciudadanos) que pedía que se comunicara e incluyera de manera específica que los centros especiales puedan adherirse a la gratuidad en la oferta de dos a tres años, implantada este curso, así como en la de uno a dos, prevista para el próximo. Aunque el PP y dos procuradores de Vox se opusieron, su voto provocó un empate en la Comisión de Educación que envía el texto al pleno, donde volverá a debatirse.
La propia María Luisa Calvo reconoció que la orden no excluye a los centros de educación especial pero tampoco los nombra, por lo que consideró necesario incluir una «especificidad», por lo que votó junto a los grupos de la oposición. El proponente, Francisco Igea, había planteado la necesidad de que se incluya en la oferta gratuita hasta los tres años a la educación especial, si bien admitió que la orden que lo regula no lo rechaza, pero tampoco lo contempla. Además, ante la negativa del PP, modificó el texto con una «autoenmienda» para que a la mayor breve la Junta comunique a los centros de educación especial que pueden adherirse y en la redacción de la orden que regule esta opción para el próximo curso se incluya específicamente la adhesión de los mismos.
Sin embargo, el cambio no hizo que la popular María del Carmen Sánchez Bellota cambiara de posición, ya que señaló esta orden se publicó en diciembre del pasado año y ya ha culminado el plazo para solicitar la adhesión. Además, precisó que la Junta no comunicada nada a ningún centro, sino que publica la convocatoria en el Bocyl. En la votación de la iniciativa, al 'sí' de Igea se unieron los seis del Grupo Socialista, el voto de UPL-Soria Ya, así como de la procuradora de Vox. Con ello, se produjo un empate a nueve, ya que los siete procuradores del PP y dos de los tres de Vox optaron por el 'no'. El presidente de la Comisión de Educación, el popular Pedro Antonio Heras comunicó el resultado de la votación y que la iniciativa pasaba a pleno para su debate.
Igea insistió en que ningún centro de educación especial de Palencia, Valladolid, Zamora y Ávila se han sumado, por lo que consideró que algo falla, en lo que coincidió con el PSOE, Soria-Ya. Sin embargo, la popular Sánchez Bellota insistió en que las órdenes de la Junta no excluyen a los centros de educación especial «en ningún momento» y destacó que aquellos que no lo solicitaron pueden hacerlo en adelante. «No excluye a ningún tipo de centros, ni públicos, ni privados, ni concertados ni centros especiales», sentenció. Añadió que «no es aconsejable, de ningún modo, que los alumnos con educación especial se escolaricen inicialmente en centros de educación especial».
El socialista Jesús Arroyo apoyó la iniciativa por «coherencia» con la posición de su partido, pero advirtió a Igea y al PP que hace dos años y medio denunciaban que el Gobierno iba a cerrar los centros especiales: «Les dijimos que era mentira». Además, señaló que ha descuidado la etapa infantil, lo que ha situado la escolarización en la Comunidad «a la cola». También, pidió a la Junta que no actúe con «tanta improvisación» como el curso pasado en la extensión de la gratuidad a la etapa de uno a dos años, según informa Ical. Desde UPL-Soria Ya, el procurador Juan Antonio Palomar planteó algunas modificaciones para que abarque a todos los escolares y señaló que la educación especial tiene un carácter «esencial».