La Asociación de Madres y Padres (AMPA) de la Escuela Municipal de Música ha pedido el traslado de la entidad (ubicada actualemnte en la calle Juan Bosco, junto a la iglesia de Santiago), al edificio del antiguo matadero, en la zona norte de la ciudad.

La demanda la hacía pública este viernes el presidente del AMPA, Lorenzo López, en el transcurso de la presentación de la XII Semana Cultural de la Escuela Municipal de Música, y ante el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Ávila, Ángel Sánchez.

López, que reconocía la labor llevada a cabo por el actual equipo de Gobierno en materia de Cultura en general, y en la escuela en particular, no quería dejar pasar la ocasión de plantear ante el edil la reclamación de los alumnos, profesores y padres y madres de la escuela. «Es verdad que ésta es la primera vez que la escuela tiene fondos», se refería López a las últimas inversiones realizadas desde el Ayuntamiento, que han permitido por una parte, renovar los aseos y el tejado del edificio con 45.000 euros; y, por otra, adquirir nuevos instrumentos, entre ellos, un piano, gracias a otra inyección económica de 12.000 euros.

Pero eso, insistía, no quita que vean necesario un traslado a un edificio como el del matadero, decía, «ahora que se está mejorando».

Sería, según él, una buena ocasión de contar con unas instalaciones dignas y de, además, dejar de poner parches en un edificio que, aseguraba, no cuenta con un plan de evacuación. «No pasaríamos la 'ITV' de los edificios», exponía el presidente del AMPA.

«Nos hace falta mucha inversión y quizá no merezca la pena seguir metiendo dinero», se refería de nuevo a esas inversiones llevadas a cabo. Bienvenidas, insistía, pero que quizá, reflexionaba, se podrían canalizar de otra manera.

A su lado, el concejal responsable del área de Cultura reconocía el mal estado del edificio que en la actualidad alberga a la Escuela Municipal de Música, a la que acuden en la actualidad 400 alumnos.

«La idea era mejorar cosas que estaban a punto de caer», se refería a las últimas obras llevadas a cabo y antes mencionadas.

Sánchez, que reconocía que «las instalaciones son mejorabables», anunciaba también a López que desconocía saber si el traslado podría ser posible al ser, exponía, algo que se escapaba de sus competencias.

«Pero recogemos el órdago de la Escuela de Música», no tenía problema en asegurar el edil responsable del área de Cultura.

«El trabajo de la Concejalía de Cultura estos cuatro años tiene un nivel alto», tomaba de nuevo la palabra López, «pero hay que reivindicar. Y la escuela no cumple con las expectativas».

Por su parte, la profesora Beatriz del Pozo, planteaba la dificultad y el enorme gasto que supondría llevar a cabo las obras que realmente necesitan en el centro.Trabajos, decía, que deberían lograr aulas adaptadas a las especiales lecciones que se imparten en la Escuela de Música.