La Universidad Católica de Ávila y la Fundación FranciscoCorell, iniciativa nacida al amparo de la Patronal de Transporte Internacional de Viajeros yMercancías por Carretera, suscribían este jueves un convenio de colaboración mediante el cual la universidad se convierte en «socia tecnológica» de la fundación a la hora de desarrollar un proyecto de plantación de árboles para reducir la emisión de gases de efecto invernadero a la atmósfera.

Así lo explicaban tanto la rectora de la universidad privada, María delRosario Sáez Yuguero, como el presidente general Fundación Francisco Corell, Miguel Ángel Ochoa de Chinchetru.

«Para la UCAV es muy importante que nos hayan elegido como socio tecnológico para colaborar en un estudio relacionado con el medio ambiente», decía Sáez Yuguero, que destacaba cómo la UCAV lleva «en su ADN» el cuidado de la naturaleza.

Así pues, ese espíritu encaja perfectamente con el proyecto propuesto desde la Fundación Francisco Corell; la realización de plantaciones que sean capaces de absorber los gases de efecto contaminante que expulsan camiones y furgonetas.

«El sector de transporte por carretera está identificado lamentablemente como uno de los mayores emisores de gases de efecto invernadero, que es una consecuencia de la civilización y su necesidad», comenzaba a exponer Ochoa de Chinchetru, que explicaba que la fundación que capitanease constituyó precisamente «para la defensa de aspectos sociales y que contribuyen a mejorar el medio ambiente y la seguridad».

De ahí que, en su día, se plantearan «avanzar en el terreno de descarbonización de las empresas y contribuir a la reducción de todos estos efectos perversos vía captación de carbono a través de sumideros materializados en plantaciones de árboles».

Para ello, explicaba, eligieron en primer lugar Castilla y León «como sitio de desarrollo al entender que es la mayor marcha arbórea de España y de las mayores de Europa», y, en segundo, la localidad abulense de Candeleda, donde se llevará a cabo la primera de esas plantaciones.

«Para ello hemos contado con la colaboración de la UCAV, que nos puede aportar además de tecnología e investigación, trabajo de campo para que este proyecto salga adelante», abundaba en la explicación Ochoa de Chinchetru, que sabe también que gracias a iniciativas como ésta se ayudará «al pequeño y mediano transportista con iniciativas que les ayuden a compensar su huella de carbono para hacerles más eficientes desde el punto de vista medioambiental».

«La fundación arranca el proyecto económicamente con la plantación inicial», matizaba Ochoa de Chinchetru cómo se va a materializar el convenio suscrito este jueves, «y cuenta con la UCAV en el apartado tecnológico y de investigación, desde las especies que se van a plantar a la organización, y la relación con otras entidades públicas».

Este proyecto, continuaba hablando el presidente general Fundación Francisco Corell, se encuentra en la actualidad en la fase de investigación de terrenos y de especies en Candeleda.