La Asociación de Familias de Alumnos de Casavieja ven con preocupación que las obras en el muro de contención del patio del Colegio Concepción Arenal que se derrumbó el pasado 9 de diciembre todavía no han comenzado, cuando apenas quedan diez días para que los alumnos vuelvan a sus aulas tras las vacaciones navideñas.

Explican desde esta asociación qure «el día 9 hará un mes del derrumbe del muro del patio del colegio de la localidad y la unica noticia que tenemos es que, al parecer, será la Junta de Castilla y León quien costeará las obras y que ya han sido adjudicadas a una empresa para su realización. Esto nos lo contaron hace una semana y desde entonces seguimos sin noticias y las obras siguen sin acometerse».

Los 104 niños de Casavieja que cursan sus estudios en este colegio «tendrán que volver a las clases en un centro completamente inseguro», subrayan desde la AFA casavejana, y afirman en ese sentido que «todo apunta a que para la Junta y el resto de administraciones, los niños de la provincia no son una prioridad», al tiempo que se preguntan que «cómo es posible que el peligroso estado del muro derrumbado y las deficiencias del resto del edificio en el que estudias menores no sean una prioridad urgente».

«Las familias y el pueblo de Casavieja se siente indignado por el abandono total de las administraciones», señalan desde la AFA, que recalcan una vez más que las mejoras en este centro deben ir más allá del urgente arreglo del muro de contención del patio norte, que se derrumbó como consecuencia de las fuertes lluvias caídas, pues en los últimos años no se ha hecho ninguna obra importante, salvo la realizada en el tejado y «el muro de la parte sur está también en muy mal estado, pero además el suelo del espacio deportivo es de hormigón, no funciona bien la puerta de emergencia, el interior del centro no es accesible y hay humedades en el gimnasio».

Y es que se trata de un colegio cuyo edificio va camino de cumplir 100 años, pues según figura en el libro de actas del Ayuntamiento (1924 a 1931), fue el 23 de abril de 1927 cuando se presentó el proyecto de escuelas, los terrenos se expropiaron en junio de ese año y el Banco de Crédito Local otorgó un crédito al consistorio para la construcción de las escuelas. Las obras se estaban finalizando en abril de 1929 y se solicitó autorización para denominarlo Grupo Escolar Reina María Cristina.