La Feria Internacional de Turismo de Madrid (Fitur), el acontecimiento de promoción turística más importante de este país, se celebra durante estos días y, una vez más, el Ayuntamiento de Ávila y la Diputación Provincial de Ávila están presentes para mostrar sus planes, sus proyectos y sus ofertas en un área que es vital para el desarrollo y el crecimiento de esta ciudad y esta provincia.
Aún con restricciones como consecuencia de la pandemia provocada por la covid-19, que sigue lastrando a un sector como el turístico que ha sufrido como ningún otro sus consecuencias y que aún tiene un tanto distante el alcanzar eso que se ha denominado «nueva normalidad», existen indicadores que apuntan a su recuperación y el año 2022 se presenta con grandes expectativas para recuperar las cifras que se alcanzaban en el año 2019, un ejercicio que quedó para el recuerdo con registros históricos y que dejaba una senda excelente para recorrerse en 2020 y que, sin embargo, quedó truncada hasta la mínima expresión por la explosión del virus.
En Ávila y provincia, el año 2022, desde el punto de vista turístico y cultural, habrá dos nombres propios: Santa Teresa de Jesús y San Pedro de Alcántara, dos grandes personajes que ha dado esta tierra y de los que este año se conmemora el IV Centenario de la canonización de la primera y el IV Centenario de la beatificación del segundo, grandes acontecimientos religiosos que pueden movilizar a miles de peregrinos procedentes de todo el mundo que acudan a 'beber' de sus raíces. Un turismo religioso que esta provincia tiene que cuidar con esmero, porque es tierra de santos cuya vida y obra dejaron una profunda huella, que en pleno siglo XXI sigue estando de actualidad y que es buscada por personas de los cinco continentes.
Pero el turismo, como tantas facetas en la vida, obliga a diversificar su campo de acción y a extender actividades durante los 12 meses del año, para ofrecer ese complemento perfecto que atraiga la atención de un visitante que siempre puede encontrar aquí patrimonio, naturaleza y gastronomía, con independencia del momento en el que acuda.
Hay que facilitar al turista que redescubra Ávila y su provincia, ofreciéndole actividades que en muchas ocasiones apenas tienen un recorrido local o provincial y que encierran un gran potencial para ser conocidas por el visitante.
El turismo es la gran industria de esta provincia, y cuando sus cimientos se tambalean repercute en todos los ámbitos sociales y económicos. Quizá no sea la posición más idónea para su desarrollo, ya que se necesita dar un impulso a su industria, y seguir apostando con firmeza para fortalecer un sector agroalimentario con enormes posibilidades, pero indudablemente el turismo merece un cuidado y una dedicación especial en Ávila. Y obliga a que todas las administraciones unan más sus esfuerzos porque estamos hablando de un producto global que es Ávila, capital y provincia. Un todo, con su patrimonio, su naturaleza, su gastronomía… que aún está por descubrir para muchos visitantes y que en 2022 tienen una oportunidad para hacerlo.