«Haydn fue el padre de la sinfonía»

D.C
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José Luis López-Antón, director de la Orquesta Sinfónica de Ávila, inició ayer el segundo ciclo del programa didáctico 'Contando la música', invitación a disfrutar de este arte que continuará con trece nuevos encuentros hasta junio

Se inició este lunes, bajo la experta batuta de José Luis López-Antón, director de la Orquesta Sinfónica de Ávila, un nuevo ciclo del programa 'Contando la música", invitación a acercarse y disfrutar de este arte desde una nueva perspectiva que, patrocinado por el Ayuntamiento de Ávila, vive esta segunda convocatoria como respuesta «a una demanda del público asistente al ciclo anterior;  hicimos un grupo de incondicionales, y como quedaba mucho repertorio por desgranar pensamos que sería bueno darle continuidad a la iniciativa».

Arrancó este segundo ciclo con la aproximación a Franz Joseph Haydn (1732-1809), «uno de los grandes de la historia de la música, abriendo así un recorrido estilístico y cronológico con el padre de la sinfonía que en las siguientes citas transitará por otros autores, como Mozart, Beethoven, Schubert, Brahms o Tchaikovsky, para llegar hasta el siglo XX con Britten».

Para acercarse a Haydn, de quien afirmó que es «el compositor que está justamente considerado el padre de la sinfonía y del cuarteto de cuerda, dos géneros que han sido vehículo de expresión para los grandes compositores de la Historia de la música a lo largo de los últimos siglos», siguió López-Antón el mismo esquema temático de las citas anteriores, comenzando con una contextualización histórica, cultural y social del compositor, «porque muchas veces cuando hablamos de los grandes artistas sólo nos fijamos en su producción y nada más, pero eran personas de carne y hueso que tenían, como todos, sus necesidades y sus problemas personales, y de esa manera creo que algo ayudamos a humanizar un poco su vida».

Explicó a continuación la esencia de lo que es una sinfonía, cómo es el género, qué movimientos la componen y cómo contrastan unos con otros, destacando de Haydn que «fue un compositor muy prolífico, tanto que compuso 104 sinfonías»; también habló de las más célebres de ese centenar y como se las pusieron los sobrenombres por los que fueron conocidas. Por ejemplo, comentó, «cuando hace la sinfonía militar e incluye la sección de percusión a la turca, tiene un marcado carácter castrense; y cuando crea la 'sinfonía de los adioses', en la que los músicos se van yendo paulatinamente del escenario hasta que solamente quedan dos violines, fue inspirado en una huelga musical convocada porque los músicos se quejaron de sus condiciones laborales, y Haydn, que tenía un gran sentido del humor, escribe qué es una huelga pero de manera musical».

«Todos los compositores que vinieron después de él», defendió José Luis López-Antón, «son, de alguna manera, deudores de Haydn a la hora de componer sinfonías y cuartetos de cuerda, porque él es el grandísimo germen, es quien sienta las bases de ambas». Algo que definió su vida, añadió, es que «estuvo siempre muy aislado, porque trabajó durante 30 años en la corte de los Esterhñazy, una familia nobiliaria de Hungría, muy alejado de las grandes urges en las que estaba lo principal de la producción musical, como podía ser Viena».