Entre el buen camino y la parálisis

L.C.S
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El último debate sobre el estado de la ciudad del mandato evidencia el distanciamiento entre equipo de gobierno y Partido Popular y PSOE, sin apenas puntos de convergencia

Entre el buen camino y la parálisis - Foto: David Castro

Debate sin sorpresas con el que se ha puesto el punto y final al curso político en el Ayuntamiento de Ávila. El debate sobre el estado de la ciudad, el último del presente mandado, evidencia el distanciamiento entre equipo de gobierno, formado por Por Ávila y Ciudadanos, y los dos grupos de la oposición, Partido Popular y PSOE, que por lo expuesto por cada uno en sus intervenciones, apenas sí ofrecen algún punto de convergencia, ni siquiera en lo que se podría considerar como 'temas de ciudad'.

Así, mientras que Jesús Manuel Sánchez Cabrera destacó en su primera intervención que la ciudad va «por el buen camino», tanto Sonsoles Sánchez-Reyes, portavoz del PP, como Yolanda Vázquez, del PSOE, consideran que Ávila sufre una parálisis derivada de la inacción de un equipo de gobierno que, a su juicio, «no ha cumplido las expectativas».

Abrió el debate el discurso del alcalde, que comenzó con un reconocimiento a la labor de Policía Local, Bomberos y Protección Civil, así como a quienes han luchado y lo siguen haciendo contra la pandemia. Estructuró su discurso por áreas, comenzando por la de empleo, en donde considera que «se han sentado las bases de futuro para tener empresas en los polígonos» gracias, entre otras cosas, a «un Plan Territorial de Fomento que va lento, pero con paso firme». Fue aquí cuando aseguró que «estamos en el buen camino para cumplir nuestro objetivo de que los abulenses puedan quedarse aquí para hacer su proyecto de vida».

En el área de medio ambiente destacó que «esta Corporación entregará como legado un futuro con agua para la ciudad» después de afrontar «por fin una solución para el abastecimiento de agua»; y en el económico «hemos conseguido sanear económicamente el Ayuntamiento, que tiene el músculo financiero suficiente para afrontar 20 millones de inversión entre los programas Edusi y Next Generation». Sánchez Cabrera avanzó que a finales de este año «habremos amortizado más del 15 por ciento de la deuda financiera que heredamos en 2019, dejándola en 25,3 cuando la cogimos en más de 30».

Para el alcalde, la «buena gestión es uno de nuestros puntos fuertes como lo hemos demostrado en situaciones como la sequía, la pandemia, Filomena o los ajustes debidos a la inflación», de ahí que, «en tres años se haya cambiado la ciudad, y ya se empiecen a ver los frutos».  Cultura en las calles, apuesta por la tauromaquia, recuperación de cifras turísticas, conciertos gratis en las Fiestas de Verano, mejoras en las instalaciones deportivas, cheques comercios, exención de la tasa de terrazas «que avanzo que seguirá en 2023» y mejoras en las calles y calzadas fueron algunos de los logros destacados por Sánchez Cabrera, que a futuro «nos queda mucho por hacer, como el nuevo pabellón para el colegio Arturo Duperier, la remodelación de la plaza de Italia, la mejora de las infraestructuras en los barrios anexionados, obras en la plaza Fuente El Sol, cerramiento de las pista de Sánchez Granado, carril bici en la zona sur, adecuación de El Soto, escaleras mecánicas en la la Cuesta Antigua y calle Ajates, la compra de seis nuevos autobuses urbanos, mejora del entorno de El Pradillo, sellado de alcorques o seguir ayudando a que las empresas sigan creciendo». En este último punto hizo un llamamiento a «todos los grupos políticos para que tengan altura de miras» en relación con la empresa que tiene previsto instalarse en la antigua estación de autobuses, proyecto que, dijo el alcalde, sigue adelante, pero que necesita de «seriedad y responsabilidad por parte de todos» para que pueda certificarse.

En su cierre, y después de escuchar a la oposición, reconoció que «vivimos realidades diferentes, con un equipo de gobierno que vive con los pies en el suelo y que nunca antes estuvo tan cercano a los ciudadanos», frente a una oposición que ve «resentida» y a la que pidió que «están a tiempo en los meses que quedan de olvidarse de trabajar para sus partidos y hacerlo para los abulenses».

La defensa de la labor del equipo de gobierno continuó con los portavoces de Por Ávila, José Ramón Budiño, y Ciudadanos, Carlos López. En el caso del primero, considera que el Ayuntamiento «ha logrado generar certidumbre» y ha demostrado «capacidad de gestión en los peores momentos, preparando la ciudad para lo que los abulenses merecen después de años de abandono», acusando al PP «de dejar una ciudad anclada en el pasado». «Seguiremos el camino que hemos comenzado porque el potencial que tiene Ávila no puede quedarse oculto en intereses partidistas», concluyó su primera intervención, para en la segunda «celebrar que veamos Ávila de diferente manera».

Por su parte, el portavoz de Ciudadanos abundó en la buena sintonía de XAV y su partido en el equipo de gobierno, tanta que cifró en «un 86 por ciento el cumplimiento del programa electoral con el que Ciudadanos se presentó a las elecciones de 2019», y destacando que se había conseguido, «poniendo a los ciudadanos en primer lugar». López comentó, una vez escuchada a la oposición, que «parece que vivimos en dos ciudades distintas en la que están los que ponen palos en las ruedas y los que venimos a trabajar por el futuro de la ciudad», invitando a que PP y PSOE se sumen «a remar».

visión de la oposición.  Los turnos de PP y PSOE pusieron la contraposición a la visión ofrecida por el equipo de gobierno. Desde las filas populares Sonsoles Sánchez-Reyes acusó al equipo de gobierno de «vivir alejados de la realidad», de «no escuchar a los ciudadanos» y de «vender humo que cada vez compra menos gente». Hilando su discurso con títulos y expresiones cinematográficas, dijo del alcalde que era «la reina de Blancanieves que se pasa el día viéndose en el espejo que le dice que es el mejor del reino» pero ha derivado hacia «Pinocho porque ha sido todo una ilusión». Sánchez-Reyes fue especialmente crítica con «la pérdida de subvenciones» y con la no presencia de la capital en las ayudas por Filomena, informando que su grupo va a pedir la creación de una comisión de investigación para conocer realmente qué había pasado. 

La portavoz del PP se refirió a la situación de «caducidad de los contratos de basura y transporte urbano» y al hecho de que, a su juicio, «Ávila ha perdido tres años en la solución del abastecimiento de agua» y acusó al equipo de gobierno de «avanzar ahora deprisa y corriendo sin planificación y amontonando proyectos» priorizando «la foto» y siendo «los campeones de las excusas, con cero autocrítica. Nunca son ustedes los responsables de nada». Sánchez-Reyes preguntó al alcalde «qué hubiera sido de su programa electoral sin los fondos Next Generation», que también se ha beneficiado del trabajo de la anterior Corporación con la EDUSI y el ARU, porque «Por Ávila promete y son otros los que tienen que cumplir».

«¿En qué ha mejorado la ciudad que sea propio de este equipo de gobierno?», se pregunto la portavoz popular, para terminar que «tendemos la mano para no convertir en Ávila en la Bella Durmiente»después de «tres años perdidos en los que ustedes ya han hecho la taquilla».

La portavoz del PSOE, Yolanda Vázquez, comenzó lamentando que «los grandes problemas que dejó el PP en Ávila no han sido solucionados» y criticando que «no haya ninguna obra de calado» más allá de la operación asfalto. Desde el grupo socialista se criticó el hecho de que «Ávila está más  sucia que nunca», también que se hayan perdido tres años en solucionar el problema del agua y se enumeró una serie de situaciones (obras en El Grande, situaciones de parques o falta de mantenimiento general) que le llevaron a Vázquez a preguntar al equipo de gobierno si «podían dormir tranquilos» viendo que «ustedes deberían gobernar para el interés de los abulenses y no para otros, con una mala gestión del dinero público», poniendo como ejemplo que «han perdido 3 millones de euros en subvenciones, algo que es una vergüenza».

Vázquez recalcó que «ni una empresa se ha acogido a los beneficios fiscales del Plan de Fomento»  y pidió que «no engañen más con la empresa para la antigua estación de autobuses que, lo último que sabemos de ese proyecto, es que no está atravesando un buen momento económico». Para el PSOE «los jóvenes, y también los mayores, son los grandes olvidados del Ayuntamiento» y comentó que «son los empleados municipales los que son su trabajo están sacando adelante el trabajo que deberían hacer ustedes», para terminar asegurando que «se creen que en 9 meses van a hacer lo que no han hecho en 3 años, y encima quieren que los ciudadanos se lo crean».