El modelo de hogar tradicional pierde su hegemonía

David Alonso
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Castilla y León cerrará esta década con más viviendas unipersonales que de dos personas, y para 2037 ya supondrán uno de cada tres en toda la Comunidad, superando incluso a los de más de tres inquilinos

Una mujer que vive sola en su casa de la capital soriana. - Foto: Eugenio Gutiérrez

Padre, madre y uno o dos hijos. Grosso modo, este es el modelo de hogar y familiar imperante en Europa, España y Castilla y León desde que se asentó la incorporación de la mujer al mercado de trabajo a mediados del siglo pasado. Hoy, setenta años después, la hegemonía de este tipo de hogar toca a su fin y su corona tiene nuevo dueño. Castilla y León cada vez tiene menos hogares con más de dos integrantes, y la previsión es que a finales de esta década los unipersonales, aquellos en los que solo vive un inquilino, sean los más habituales de la Comunidad.

Concretamente, uno de cada tres domicilios de Castilla y León tendrán un solo habitante dentro de tres lustros, cuando a comienzos de este siglo apenas representaban el veinte por ciento del total, y adelantarán por la derecha a los de dos integrantes, que han comandado la clasificación durante los últimos años.

La sucesión de crisis de este siglo, la precariedad laboral, y el incremento de la esperanza de vida han disparado el número de personas que, bien por elección, o bien por obligación, viven solas en la Comunidad. Si en el año 2002 había 206.476 hogares unipersonales, en la actualidad superan ya los 320.000, y las estimaciones que maneja elInstituto Nacional de Estadística (INE) hablan de casi 400.000 en el 2037.

El modelo de hogar tradicional pierde su hegemoníaEl modelo de hogar tradicional pierde su hegemonía

La cifra servirá para sobrepasar con creces los viviendas con tres o más inquilinos, es decir, aquellas que corresponden a los modelos de familia tradicionales en occidente, que dentro de quince años  apenas superarán los 320.000 hogares. Una evolución que se traducirá en que el tamaño medio de los domicilios de Castilla y León se haya reducido en casi una persona desde comienzos de siglo, al pasar de los 2,72 personas por hogar del año 2002, a las 2,1 que se esperan para dentro de tres lustros.

Y es que, solo las viviendas con una o dos personas experimentan cifras positivas en su línea temporal, y se espera que entre 2002 y 2037 hayan crecido un 80 por ciento, con 165.000 más. Los de dos inquilinos también tiran hacia arriba de su estadística, con un 50 por ciento más que a comienzos del SigloXXI, y llegarán a 2037 con 120.000 hogares más. Por el contrario, los de tres personas mermarán un tres por ciento, con siete mil menos; los de cuatro hacen lo propio con 63.210 menos, un 35 por ciento por debajo de la cifra de principios de siglo; mientras que los de más de cinco personas   se hunden un 70 por ciento, con sesenta mil menos.

Tal es la relevancia que están adquiriendo, y que se espera que tengan las viviendas unipersonales, que la Junta de Castilla yLeón presentó hace un año un Plan Estratégico contra la Soledad no Deseada dotado con cien millones de euros para combatir la situaciones de vulnerabilidad de aquellas personas que viven solas por obligación, en especial en aquellos casos de mayor edad.