CON el 1 de enero de 2023 llegará el fin, con carácter general, de la medida impulsada por el Gobierno desde el mes de abril para ayudar a aliviar la subida del precio de los combustibles, los veinte céntimos de descuento por cada litro de carburante. El anuncio se materializó el martes y desde entonces viene provocando un auténtico aluvión de visitas a las estaciones de la ciudad y la provincia. La afluencia, eso sí, está siendo escalonada y previsiblemente continuará este sábado, el último día del descuento estatal al repostaje para el consumidor particular, ya que los transportistas profesionales se seguirán beneficiando de la ayuda unos meses más.
Las gasolineras abulenses vienen registrando estos días un goteo incesante de clientes que, en momentos puntuales, deriva en colas para poder acceder al surtidor del combustible. Desde la Asociación de Estaciones de Servicio de Ávila comentaron el miércoles que esperaban poder «aguantar» el aluvión de clientes y que estaban registrando más problemas con el gasóleo B (agrícola y para calefacción), ámbito en el que igual no iban a poder atender todos los pedidos.
Mientras eso ocurre, el Gobierno daba a conocer este viernes que la bonificación al combustible ha supuesto un importante ahorro para los abulenses, y de hecho en Castilla y León ronda los 325 millones de euros desde su entrada en vigor el pasado mes de abril.
Así, el Gobierno ha abonado ya, hasta noviembre, cerca de 15 millones de euros (exactamente 14.838.608,02 euros) a las estaciones de servicio y otros operadores del sector en la provincia de Ávila (288,5 millones en Castilla y León) en concepto de la devolución de las bonificaciones practicadas en los repostaje de combustible. Faltaría la devolución correspondiente al mes de diciembre, que todavía no está cerrado. Ávila es la segunda provincia de Castilla y León que menos importe ha recibido, superando únicamente a Soria, con 13,5 millones.
Esta medida forma parte del Real Decreto-ley 6/20022, de 29 de marzo, por el que se adoptaron medidas urgentes en el marco del Plan Nacional de respuesta a las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania. Entre otras acciones, el Gobierno acordó una bonificación universal de 20 céntimos por litro de combustible repostado. Esta ayuda se ha aplicado a los ciudadanos en el momento del repostaje y, posteriormente, el Estado abona a las estaciones de servicio la cantidad correspondiente.
El descuento entró en vigor por primera vez el pasado 1 de abril. Iniclamente la medida estaba prevista hasta el 30 de junio, pero el Gobierno de Españo prorrogó la bonificación hasta el 30 de septiembre, para después prorrogarla una vez más hasta el 31 de diciembre.
La medida concluye el 31 de diciembre con carácter universal. No obstante, el Gobierno ha prorrogado hasta el 30 de junio de 2023 la bonificación a los combustibles para el sector del transporte profesional por carretera. Esta nueva ayuda, recogida en el Real Decreto-ley para responder a las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania aprobado esta semana en Consejo de Ministros, se articula en dos fases: la primera contempla un descuento de 20 céntimos por litro de combustible consumido entre el 1 de enero y el 31 de marzo, y la segunda una bonificación de 10 céntimos de euros entre el 1 de abril y el 30 de junio.
Para las flotas movidas por gas se prevé una compensación de 27 céntimos hasta marzo y de 14 céntimos de euros durante el segundo trimestre del año, dadas las especiales circunstancias a las que se enfrenta el precio del gas en esta reciente etapa.