El próximo 12 de septiembre los opositores declarados aptos en el proceso selectivo de la convocatoria para cubrir plazas de alumnos de la Escala Básica del Cuerpo Nacional de Policía se incorporarán a la Escuela Nacional de Policía de Ávila. En total, 2.218 futuros policías que ese día comenzarán su curso de formación policial en la capital abulense y lo harán, con carácter general, en régimen de internado. Recupera de este modo la Escuela de Policía de Ávila «la normalidad» en este sentido después de unos años en los que por distintos motivos parte del alumnado de Escala Básica tuvo que vivir fuera de las instalaciones policiales de la capital abulense mientras realizaba su formación.
«Se vuelve a la normalidad», confirma el director de la Escuela de Policía de Ávila, el comisario José Luis Tejedor, al hablar de ese régimen de internado que desde que se inauguró este centro de formación policial ha sido la norma para los futuros policías. Sin embargo, reconoce Tejedor, en las últimas convocatorias varias circunstancias habían llevado a que una parte del alumnado tuviera que residir fuera de estas instalaciones durante su formación policial. Así ocurrió, recuerda, en los años de las promociones multitudinarias como la de 2018, cuando se convocaron 3.200 plazas para Escala Básica que, sumadas a la de Ejecutiva, hacían imposible que la Escuela de Policía de Ávila albergara a tantos alumnos. Entonces, y en aquellas otras promociones en el que la oferta de plazas fue muy numerosa también, haciendo imposible dar solución habitacional a todos los opositores aptos, se optó porque una parte de los alumnos realizaran su formación policial pero residiendo fuera de las instalaciones que la Policía Nacional tiene en la avenida Juan Carlos I.
Además del hecho de que haya habido convocatorias con más plazas ofertadas que las que permite para el alojamiento la Escuela de Policía otra de las razones que en los dos últimos años propició que parte del alumnado residiera en régimen de externado fue la pandemia. No en vano, durante las dos últimas convocatorias, marcadas por la irrupción del covid, uno de los diez bloques de habitaciones con los que cuenta la Escuela de Policía se ha reservado para poder acoger temporalmente a aquellos alumnos que dieran positivos y que tuvieran que ser aislados del resto de sus compañeros. Esto hizo que una décima parte de las plazas quedarán libres y que, por tanto, parte de los alumnos tuvieran 'permiso' para residir fuera de la Escuela de Policía.
Ahora, con un número de alumnos que perfectamente pueden residir en la Escuela de Policía, y sin restricciones sanitarias relacionadas con el covid como las que existieron tiempo atrás, las instalaciones policiales de Ávila pueden albergar perfectamente a todos 2.200 alumnos de Escala Básica que a partir del 12 de septiembre comenzarán su formación policial en Ávila, recuperando así la «normalidad», insiste Tejedor.