La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) ha adjudicado las obras de restauración fluvial del río Trabancos, que hace su recorrido en Ávila y Valladolid, por un presupuesto de 1.389.000 euros.

La obra incluye la restauración del río Trabancos desde el municipio de Narros del Castillo en la provincia abulense hasta su desembocadura en el río Duero, en el término municipal de Pollos. Todo ello se enmarca dentro del proyecto Life-IP Duero para la mejora de los recursos híbridos de la cuenca a través de soluciones innovadoras, sostenibles y participativas. El plazo de ejecución previsto en el proyecto es de treinta y seis meses.

La restauración fluvial de las corrientes de agua de la meseta, como es el caso del río Trabancos, supone una oportunidad única para implementar medidas adaptativas basadas en la naturaleza que puedan contrarrestar los efectos de la presión constante del ser humano y del cambio climático.

Problemas que presenta. El río Trabancos, al igual que algunos otros de la cuenca del Duero como el Arevalillo y Zapardiel, presenta problemas como la rectificación y canalización del cauce, y la falta de vegetación de ribera en muchos tramos. Sin embargo, a diferencia de los afluentes a los que se hace referencia en este mismo párrafo, el estado de conservación del río Trabancos es algo mejor debido a un régimen de caudales más favorables en su tramo alto-medio.

Con esta restauración se tiene como objetivo principal recuperar la naturalidad del cauce y potenciar sus hábitats para que alberguen una interesante comunidad biológica, donde se intensificarán los trabajos de plantación de vegetación.