La Guardia Civil, dentro del marco de la Operación Red-Dot, ha investigado a tres personas como presuntas autoras de los delitos de furtivismo y relativos a la protección de la fauna.

Esta operación comenzó el pasado mes de julio, cuando un guarda de la Reserva de Caza de Extremadura (Cáceres) alertó a la Guardia Civil de la presencia de posibles cazadores furtivos con arma de fuego que se dirigían hacia el límite de la provincia de Ávila, concretamente a la Reserva Regional de Gredos.

A raíz del aviso, la Guardia Civil interceptó a una persona que portaba en el interior de una mochila una cabeza-trofeo de macho montés sin autorización ni precinto que acreditara su identidad, hechos por los cuales fue investigada. Continuando con las investigaciones, se consiguió localizar a otra persona y se intervinieron dos rifles que se sospechó que pudieran haber sido utilizados para dar muerte al animal. Ambos hechos fueron comunicados al Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León así como a la Fiscalía y Juzgado competente, por un presunto delito relativo a la Protección de la Fauna.

Continuando con la persecución de este tipo de hechos delictivos, durante el presente mes se llevaron a cabo servicios de vigilancia de actividades cinegéticas por la zona de la Moraña, observando a varios cazadores que realizaban una tirada de tórtolas y palomas. Tras ser identificados, se descubrió que carecían de la correspondiente autorización para el ejercicio de esa actividad, que tampoco poseían el permiso de armas correspondiente y que habían abandonado vainas de cartuchos en la zona. En esa operación, que también se puso en conocimiento de las autoridades competentes, fueron intervenidas cuatro escopetas de caza y siete reclamos.

También en este mismo mes, tras tener conocimiento del guarda mayor de la Reserva de Gredos de la posible existencia de cuatro personas que pudieran dedicarse al furtivismo en la zona norte de dicho espacio protegido (donde además recientemente se han encontrado cadáveres decapitados de machos de cabra montés), la Guardia Civil, junto con un celador de caza, identificó a una de esas personas, que portaba sin autorización un rifle, navajas, serrucho para el corte del trofeo de caza, munición y visor.

Ante las evidencias encontradas, esta persona fue investigada y se puso en conocimiento del Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, de la Fiscalía y del Juzgado Competente por un presunto delito relativo a la Protección de la Fauna.

Esta Operación Policial ha sido realizada por el Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Ávila en la Reserva Regional de Gredos y cotos aledaños.