La violencia machista golpea a la Comunidad un año después

SPC
-

El asesinato, el número 57 en la región desde que hay registros, se produjo en Soria de madrugada mientras su hija, de 8 años, dormía. El agresor escapó tras el crimen pero fue detenido más tarde

Imagen de la puerta del domicilio de la capital soriana donde la madrugada de ayer se produjo el crimen machista. - Foto: Ical

Una mujer venezolana de 35 años se ha convertido en la primera víctima de la violencia machista este año, después de que su pareja, de 32, la apuñalase hasta la muerte en el domicilio en el que ambos convivían con su hija de ocho años. Casi un año después, la lacra de la violencia de género vuelve a golpear a Castilla y León –el último caso fue el 30 de junio de 2021 en Doñiños (Salamanca)–, y eleva a 57 el número de mujeres asesinadas en la Comunidad por sus parejas o exparejas desde que comenzaron los registros en el año 2003. El agresor, también de nacionalidad venezolana y sobre el que no existían denuncias previas, huyó del domicilio tras cometer el asesinato, pero fue detenido poco después por agentes de la Policía Nacional. Durante la investigación se intervino un cuchillo doméstico empleado en el asesinato de la mujer, quien mantenía una relación con el presunto homicida, desde hacía aproximadamente seis meses.

Cuando sucedieron los hechos, sobre las 02.00 horas de la mañana, un tío de la víctima que se encontraba en el domicilio y al que la mujer pidió ayuda alertó a otro tío de la mujer que vio y avisó en la calle a una patrulla de la Policía Nacional que en esos momentos estaba de servicio. Esa patrulla se dirigió a la vivienda y a su vez informó a otro coche policial de la descripción del supuesto agresor, que fue interceptado por los agentes y detenido sin resistencia. 

De forma paralela también fueron alertados los servicios médicos para que asistieran a la mujer así como los servicios judiciales. «No nos consta» que el supuesto autor tuviera antecedentes ni que existieran denuncias previas, ni que la víctima estuviera en el sistema Viogen –de protección a las víctimas–, detalló la delegada del Gobierno, Virginia Barcones, que informó de los avances de la investigación antes de participar en un acto enValladolid, en el que se guardó un minuto de silencio en repulsa por este nuevo crimen machista. Allí, la delegada expresó la conmoción y la repulsa por el asesinato, y detalló que la víctima tenía una hija menor de edad, que en el momento del suceso, ocurrido sobre las 02:00 horas, se encontraba en su habitación y se supone que, por la hora que era, estaría dormida.

Por su parte, el jefe superior de Policía de Castilla y León, Juan José Campesino, detalló que todavía no se había tomado declaración al detenido, quien no había dicho nada y no se había declarado culpable ni no culpable. La hija de la fallecida se encuentra a cargo de su familia, tal y como concretó Barcones, que reiteró sus condolencias hacia la menor, la familia y los amigos. «La niña está muy bien atendida por sus familiares, que ya cuentan con la asistencia psicológica necesaria. Todas las administraciones estamos para ayudarles en todo lo que se pueda», señaló en Soria la subdelegada del Gobierno en la provincia, María Jesús Lafuente.

La presidenta de la asociación Antigona –constituida para defender a las mujeres que sufren violencia de género–, Pilar de la Viña, reconoció que la víctima tenía un buen trabajo en la hostelería, donde era reconocida y valorada.

La Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género confirmó a lo largo de la jornada de ayer la naturaleza machista del asesinato ocurrido ayer enSoria, con lo que ya son 19 las mujeres muertas por violencia de género en España este 2022 y 1.149 desde 2003, según informa Efe. 

El asesinato de la mujer soriana provocó durante la jornada de ayer una cascada de minutos de silencio en todaCastilla y León, así como mensajes de repulsa contra la violencia de género y de recuerdo y consuelo para la familia de la víctima.

Un familiar de la víctima se hará cargo de la niña

El portavoz de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, detalló ayer que un familiar se hará cargo de la hija de la mujer asesinada en Soria ayer a manos de su pareja, una niña de ocho años de edad. El portavoz de la Junta, quien en un primer momento desconocía si sería necesaria la entrada de los Servicios Sociales para acoger a la menor, detalló que la administración regional siempre apuesta por el acogimiento familiar antes de acudir a un centro de menores, algo que, en este caso, ha podido ser así.

Mensajes de repulsa

El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, hizo un llamamiento a la unidad entre instituciones para trabajar juntas en la concienciación y educación de la sociedad frente a la «lacra» de la violencia de género. «Desde el Gobierno de Castilla y León condenamos rotundamente el asesinato por violencia de género de una mujer en Soria», escribió en su cuenta de Twitter minutos después de participar, junto al resto de miembros de la Junta en un minuto de silencio por el asesinato machista ocurrido en la capital soriana. Durante la concentración, una vez celebrado el Consejo de Gobierno, tanto el presidente de Castilla y León como el resto de consejeros del PP lucieron en la solapa el lazo morado característico de la lucha contra la violencia machista, algo que no hicieron los tres consejeros de Vox, ni el vicepresidente.

Precisamente el número dos del Ejecutivo, Juan García-Gallardo, que condenó el asesinato de «una madre», avanzó en la red social que, «a partir de ahora», el Gobierno autonómico recordará a todas las víctimas de violencia intrafamiliar, «sin distinción de género ni parentesco». También se sumó a las condolencias el secretario regional del Partido Socialista, Luis Tudanca, que reclamó que no haya «más dudas» contra la violencia de género. «La violencia de género es dramáticamente real y suma un nuevo asesinato», sentenció. Una postura que también compartieron CCOO y UGT en sendos comunicados de repulsa. La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, apostó por trabajar desde la unidad para «erradicar la lacra» de la violencia de género.