El neerlandés Max Verstappen (Red Bull), vigente campeón de Fórmula Uno, ha ganado las tres últimas carreras del Mundial, ha remontado desde más atrás de la décima posición de la parrilla de salida en las dos más recientes y este fin de semana lucirá su 'corona' en casa.

Nadie le tose al joven piloto, que lidera con amplio margen el campeonato y, a la vista de sus espectaculares últimas actuaciones, no encuentra rival. Todo apunta a otra cita con 'Mad Max' como protagonista, aunque hay amenaza de lluvia, especialmente mañana, y eso podría complicarle.

El Gran Premio de los Países Bajos, decimoquinta prueba del Campeonato del Mundo, aguarda al vigente campeón, que por primera vez lucirá su éxito en casa, con su familia, sus amigos, sus fans, con la clasificación de corredores encaminada hacia su segundo título, solo amenazado en los albores de la temporada por Ferrari.

No hay quien discuta el dominio del 'rey' Verstappen, a pesar del ejercicio de resiliencia de Carlos Sainz (Ferrari), que ayer cumplió 28 años.

El neerlandés lleva nueve victorias de 14 posibles y ha vencido consecutivamente en Francia, Hungría, saliendo desde la décima plaza, y Bélgica, remontando desde la decimotercera.

Solo Bruce McLaren había logrado una proeza similar saliendo tan retrasado en la parrilla, pero lo consiguió entre dos campañas, en la carrera final de 1959 y la primera de 1960. Verstappen, en este sentido, también es único.

Domina el actual líder y también Red Bull. En Spa firmaron su cuarto doblete de la temporada con Sergio Pérez (Red Bull) por detrás del campeón. El mexicano ya ha batido su récord de puntos en un campeonato. Lleva uno más que los 190 de todo el curso pasado y faltan ocho carreras.

Verstappen espera una escudería de Ferrari fuerte en el trazado de Zandvoort, en la costa del Mar del Norte, donde los monoplazas completarán en la jornada del domingo 72 vueltas de 4.259 metros cada una para un total de 306 kilómetros, con 14 curvas, 10 de derechas y cuatro de izquierdas.

El circuito de los Países Bajos, enclavado en las ondulantes dunas de arena, junto al mar, transmite la sensación de los trazados de la vieja escuela, una montaña rusa de giros a gran velocidad que exigirán numerosos cambios de dirección y una carga aerodinámica bastante alta. Sus pocas rectas largas suponen un alivio para las unidades de potencia.

Un desafío

Adelantar será todo un desafío, principalmente, por la secuencia de curvas, lo que incrementará la importancia de la clasificación de mañana en esta cita que, para rizar el rizo, presenta dos asfaltos diferentes, uno antiguo y otro más suave, de 2020. Una auténtica prueba para los neumáticos.

En 2021, Zandvoort regresó a la Fórmula Uno e impulsó a Verstappen hacia su primer título mundial, el que selló en la última parada de la temporada pasada para acabar con el dominio de Mercedes y de Lewis Hamilton (Mercedes), quien la semana pasada abandonó en Bélgica tras un error en el primer giro que perjudicó a Fernando Alonso (Alpine).

El bicampeón del mundo, quinto en Spa, fue sexto el año pasado en los Países Bajos, una posición por delante de Carlos Sainz, quien lideró las primeras vueltas en Bélgica y acabó en el tercer cajón del podio, por detrás de los dos Red Bull.

El madrileño, que había firmado su segunda 'pole', marcha cuarto en el campeonato de pilotos, a 15 puntos de su compañero de equipo, Charles Leclerc, a 20 de Checo Pérez y a más de 100 de Verstappen, que maneja una renta de 93 sobre su compañero de escudería.

El título de pilotos parece muy decantado y también el de constructores, con Red Bull al frente y una ventaja de 118 puntos sobre Ferrari.