La de  'Tadeo y Pepona' es una de las historias que se relataron a la veintena de personas forman parte de uno de los dos grupos que en la tarde de ayer visitaron las dependencias de la Casa Consistorial en el marco de la actividad de puertas abiertas que ha organizado el ayuntamiento de Ávila con motivo del Día de la Constitución. Estas visitas se desarrollan los días 2 y 3 de diciembre, en dos sesiones vespertinas, a las 16,00 y a las 17,15 horas. Todos los grupos ya están cubiertos. Además de estos dos históricos personajes de la ciudad los visitantes también  pudieron detenerse en el ejemplar d e la constitución sobre el que  juran o prometen los que toman posesión de sus cargos o las mazas de la ciudad.

 «Es algo habitual en el ayuntamiento, al menos en este mandato, señalaba el alcalde de la ciudad Jesús Manuel Sánchez Cabrera, para enseñar a los abulenses lo que es el ayuntamiento como institución y mostrar aquellos lugares donde se toman las decisiones: el Salón de Plenos Municipal, el despacho del alcalde o la Sala de Junta de Gobierno».

Israel Muñoz, el técnico en Accesibilidad del Ayuntamiento de Ávila, que se encarga de mostrar a los visitantes las distintas dependencias municipales y de contar anécdotas sobre personajes que han pasado por este ayuntamiento. señalaba que esta actividad  «es una forma de forma de fijarse en los detalles» y añadía que  la Casa Consistorial «es conocida por toda la ciudadanía abulense, pero para hacer trámites, gestiones y no tanto par disfrutarla. Este es el momento para disfrutarla, para descubrir esas historias que esconde no solo sobre el edificio sino también en torno al callejero abulense, a personajes, a hechos anecdóticos, al propio protocolo y ceremonial de la Corporación Municipal, de las diferentes salidas bajo mazas o esas pequeñas historias que también las propias personas que asisten a la visita enriquecen con sus conocimientos».

Una de esas historias es la de 'Tadeo y Pepona', los dos cabezudos históricos que tiene la corporación municipal. Los gigantones y cabezudos son elementos propios de la fiesta. Los gigantones y los cabezudos nacen en un primer momento vinculados  a la procesión del Corpus Christi. De hecho, recordaba Muñoz,  los primeros gigantones eran propiedad de la Catedral abulense y en 1911 el Ayuntamiento decide  adquirir unos gigantones nuevos, que compra en Madrid. Para tener también la figura de los cabezudos encarga al delineante municipal de aquella  época, Pedro del Castillo, hacer dos paisanos abulenses (hombre y mujer) inspirados en personajes del Valle Amblés. «La anécdota es que fueron presentados en sociedad a través de una cena de gala. En esa cena se hicieron unas coplillas. Dentro de estas visitas y conmemorando a esas coplillas y para dar un carácter más jocoso a esta visita también el año pasado compuse unas coplillas  nuevas que tienen que ver con la pandemia», comentaba  Muñoz.