Una semana puramente invernal es en la que está inmersa Ávila capital y provincia. De hecho la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) que activó para este martes aviso amarillo por frío lo mantiene para mañana también por lo mismo y el jueves, por nieve.
En lo que respecta a Ávila capital ha habido y seguirá habiendo heladas, los termómetros bajarán hasta los -5 grados y lo peor de todo es que en las máximas no subirán de cero grados. Para mañana los -5 de mínima se mantienen si bien las máximas serán más 'agradables', hasta los 3 grados puede subir el mercurio.
En cualquier caso están siendo jornadas especialmente frías como demuestran los datos de observación de la Aemet en los que las temperaturas máximas y mínimas están muy cerca de los cero grados. Por poner un ejemplo, hasta las 8 de la mañana en Ávila la mínima la marcó el Puerto El Pico con -3,8 grados si bien el termómetro no había subido de los -2,3. En Candeleda y El Barco de Ávila coincidieron sorprendentemente en las mínimas con -1,7 grados, ahora bien la máxima en el municipio del Tiétar era de 6,7 grados a las 00,00 horas mientras que en El Barco era de 0,5 grados. Llegamos a la capital con mínimas rondando los cero grados (0,7) y máximas de 1,1 y los mismos registros en Arévalo. En Cebreros 0,2 de mínima y 0,7 de máxima. En definitiva un martes que empieza a confirmarse que será especialmente frío.
Mañana será similar en las mínimas aunque las máximas subirán unos grados de cero y para el jueves regresa la nieve y hay aviso amarillo por acumulaciones de hasta 5 centímetros en 24 horas en cotas superiores a los 800 metros. También las blancas precipitaciones podrían repetirse el viernes cuando se registrarán temperaturas en Ávila capital de -3 y 3 grados en mínimas y máximas. Por cierto de cara al domingo las mínimas volverán a bajar y el lunes todavía más, hasta los -7 grados según las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología.
En cuanto a las carreteras no hay vías con cadenas en la provincia de Ávila pero sí algunas zonas con presencia de nieve y hielo en las que hay que extremar la precaución, sobre todo, las que se corresponden con puertos de montaña o en la vertiente norte de Gredos.
Debido a las bajas temperaturas "y a las leves precipitaciones en forma de nieve" desde primera hora de la mañana el Ayuntamiento de Ávila con los servicios municipales y Protección Civil trabajan en calzadas y aceras además de en barrios anexionados "para facilitar la circulación de vehículos y peatonal" tal y como apuntan en su cuenta de Emergencias de Ávila.
Precisamente por la situación que atravesamos en lo meteorológico el Ayuntamiento de Ávila ha reforzado el operativo especial para atender a las personas sin techo. El alcalde de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, ha sido quien ha recordado que "existe un programa de atención continuada a personas que pueden presentar necesidades de alojamiento a lo largo de todo el año, que se refuerza con la llegada del invierno y las bajas temperaturas".
Este operativo implica no solo a los efectivos del Área de Servicios Sociales, a través de las trabajadoras sociales, sino también a efectivos de Policía Local, "que pueden ser quienes primero detecten la presencia de personas en situación de vulnerabilidad en la calle". Ante un caso de estas características, el operativo que se pone en marcha hace que la persona atendida disponga de un alojamiento alternativo, a la vez que un trabajador social del Ayuntamiento estudia su situación, con el objetivo de poder disponer los recursos que precise.
El alcalde de Ávila incide en que "todos los vecinos pueden colaborar en este operativo en el caso de que se conozcan casos de personas sin hogar, a los que el Ayuntamiento puede proporcionar alojamiento, especialmente en episodios de bajas temperaturas como los que se están registrando estos días". De la misma forma, se cuenta con un convenio de colaboración con Cáritas Diocesana, a través del programa de atención sociosanitaria destinado a personas sin hogar, que permite alojar a personas sin cobijo en el Hogar Santa Teresa. El programa de alojamiento alternativo, que se desarrolla para transeúntes a lo largo de todo el año, atendió en 2022 a 56 personas.