El Zona Norte vuelve a ser equipo de Nacional Juvenil, una categoría que ya saboreó en otras dos etapas (2009-2010 y 2010-2011, 2012-2013 y 2013-2014) de su historia y que una década después volverá a disfrutar de la mano de Pablo García, el 'hijo del sevillano', aquel espigado mediocentro que entonces portaba el '10' a su espalda en un equipo que jugaría durante dos años la Nacional Juvenil.
A los mandos Luis Miguel Martín del Río 'Luismi' junto a un joven, como todos hace diez años, Alberto Zamora. En la banda Santiago Sanz 'El Barbas'. Habría disfrutado este último ascenso como disfrutó los anteriores. Sobre el césped jugadores como Juan Berlanas, Dani, los hermanos Javi y Pablo Nieto, Nacho, Román, Alberto, Borja, Del Monte, Jorge, Roberto, Iván, Manu, Yuste, Fernando,Camilo,Keko,Blanco... Muchos nombres que recordar y uno de ellos que toma ahora protagonismo, Pablo, 'el hijo del sevillano', entonces jugador de aquel equipo que conseguía el ascenso desde la Regional Juvenil 2011-12 como segundo tras los pasos del Calasanz, campeón.
Dos temporadas consecutivas (2012-13 y 2013-14) estaría aquel equipo –para muchos era su último año como juvenil– en la Nacional Juvenil. En su primera temporada, y pese a una gran primera vuelta, se salvó de la quema final en la última jornada. Porque hasta cinco equipos descendieron aquel curso por culpa de los arrastres. Fue en una última jornada de infarto en el ManuelSánchez Granado.Porque la permanencia entonces pasaba por vencer al Zamora y esperar la 'carambola' de que la Ponferradina, el Burgos Promesas 2000 o el Numancia B no ganasen. Y llegó la oportunidad. No ganó el Burgos Promesas 2000 y se ganó al Zamora por 3-1 con último gol de Pablo desde el punto de penalti en una de esas tardes en las que se llenaron las gradas y la banda del Manuel Sánchez Granado. «Cuando tenía el pelo largo» sonríe ahora su protagonista diez años después cuando ve la foto del penalti con la que sentenció aquel partido.
En la 2013-14 el Zona Norte compartiría protagonismo –como lo hará el próximo año– con el Colegios Diocesanos. Entonces ambos acabarían en descenso. La pregunta es obligada. ¿Tiene Ávila suficiente capacidad para tener dos equipos en NacionalJuvenil? «La respuesta la veremos este año. Es complicado. Espero que sí, por la cuenta que nos trae a los dos –Zona Norte y Diocesanos– pero es complicado, dado que aunque los chicos han demostrado tener nivel no hay tantos jugadores» avisa, aunque el tiempo dará la respuesta final.
Lo que tiene muy claro es que «una provincia como Ávila sea capaz de tener dos equipos juveniles nacionales habla del buen nivel que hay en estas categorías. Se debería aprovechar mucho más a estos jugadores cuando acaban estas etapas formativas. Se aprovecha muy poco. Se podrían decir unas cuantas generaciones de futbolistas que 'se han tirado a la basura'. Creo que si coges a los mejores jugadores que salen de juveniles se podría conformar perfectamente la base de un Tercera al que sumar gente que te permita dar el salto de calidad».
Suma su nombre Pablo García al de otros como el de Juan 'El Cartero' o Luis Miguel Martín del Río que llevaron al equipo –aunque sea el final de un trabajo fruto de todos– a la Liga Nacional Juvenil y suma otra plantilla que se abre hueco en la particular historia de este club. César, Aitor, Pedro, Del Río, Pablo, Sergio, Gonzalo, Pedro, Jorge, Adam, Jorge, Samuel, Moñivas (mejor portero del Grupo A), Ignacio, Víctor, Manuel de los Reyes, Khalid Ballit, Daniel... Nombres de otro ascenso histórico para el Zona.