La polémica sesión plenaria de este martes tuvo su eco durante este miércoles, momento en el que el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, fue cuestionado sobre las palabras de su vicepresidente, JuanGarcía-Gallardo, y de su consejero de Empleo, Mariano Veganzones. El primero acuso al PSOE de ser una «banda criminal» y tener una «historia llena de crímenes» –expresiones que fueron borradas del Diario de Sesiones por orden del presidente de la Cámara, Carlos Pollán–, y el segundo aseguró que en Castilla y León «no faltan trabajadores, sino ganas de trabajar». Dos hechos que el máximo dirigente autonómico zanjó de forma distinta. 

Mañueco no quiso entrar a valorar las palabras de su número dos y se limitó a asegurar que «no me gustan las descalificaciones, ni los exabruptos vengan de donde vengan». «Creo que tengo la autoridad moral suficiente para pedir a todo el mundo bajar el tono», prosiguió el presidente de la Junta, que consideró que el presidente de las Cortes, Carlos Pollán, zanjó el tema al retirar sus palabras del Diario de Sesiones.

Sin embargo, se mostró más contundente sobre las declaraciones del consejero de Empleo, también de Vox, y defendió que el desempleo «es un tema especialmente relevante sobre el que no se puede frivolizar». En este punto aseguró que el Gobierno de la Comunidad está «comprometido» con todas las personas «que tienen la necesidad de trabajar»

«Mientras haya un solo parado, vamos a estar dando la batalla para que esta sea una tierra de oportunidades», zanjó el presidente, quien añadió que se trabajará para que cada vez haya «más oportunidades» en la Comunidad, algo que también se verá con las medidas incluidas en los Presupuestos para 2023.

«Era por los sindicatos»

El propio Veganzones salió más tarde a explicar sus polémicas declaraciones y aseguró que quería dar «un mensaje de atención» a los sindicatos que «se niegan a hacer aportaciones a las nuevas estrategias y programas». En cualquier caso, insistió en que «hay una falta de apetencia de entrar al mundo laboral y quedarse apegados a las ayudas».

Precisamente los sindicatos de clase, CCOO y UGT, arremetieron ayer con dureza contra el consejero por sus palabras y exigieron en sendos comunicados su cese inmediato. El secretario regional de CCOO, Vicente Andrés, consideró «inadmisible» que el responsable de Empleo asegurase que «faltan ganas de trabajar», e instó a Fernández Mañueco a cesarlo «de manera fulminante». «Es una paradoja que Veganzones acuse de vagos a los castellanos y leoneses cuando, en la pasada legislatura, él dejó la Consejería de Empleo porque decía que había mucho trabajo y no soportaba el ritmo», desveló el líder sindical. 

En la misma línea, el líder regional de la UGT, Faustino Temprano, consideró que el presidente de la Junta debe «presentar su dimisión» en caso de no cesar al consejero, y sino  «es porque está de acuerdo con él». «Lo que quiere Veganzones son trabajadores en condiciones precarias, con salarios bajos, trabajadores pobres», sentenció Temprano.

Sanción a Gallardo

Por otra parte, y también ayer, la Mesa de las Cortes admitió a trámite la iniciativa parlamentaria de los Grupos Mixto y Socialista para convocar a la Comisión de Procuradores con el objetivo de valorar una propuesta de sanción al vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, a raíz de lo ocurrido en el pleno del pasado 20 de septiembre de 2022, en la que llamó «imbécil» al procurador de Ciudadanos, Francisco Igea.