Habilidades para controlar el día a día

B.M
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La psicóloga Beatriz del Castillo ofreció una conferencia sobre el 'Impacto psicológico de la pandemia', hablando de pautas que pueden ayudar, partiendo de diferenciar lo que está al alcance de mi control y lo que no

Habilidades para controlar el día a día

La pandemia de la covid-19 supuso un punto de inflexión en muchos aspectos y el psicológico no iba a quedar fuera. Precisamente el 'Impacto psicológico de la pandemia' es el tema elegido por la psicóloga Beatriz del Castillo para la charla que tuvo lugar ayer en Ávila. Forma parte de las conferencias organizadas por el Colegio de Psicología de Castilla y León con el objetivo de ofrecer a la ciudadanía herramientas para afrontar su vida diaria. Entre las diferentes paradas que habrá, varias serán en Ávila para tratar temas como trastornos de conducta alimentaria, el duelo después del suicidio, el control emocional a la hora de preparar una oposición y la prevención de conductas adictivas.

Pero en esta ocasión era el turno de la pandemia, en una conferencia que iba a partir, explicó la encargada antes de comenzar, del enfoque general de la «sensación de descontrol que nos ha generado la pandemia a una de mayor control, desde donde podemos adquirir ese control frente a todo lo que ocurre a nuestro alrededor», siempre teniendo en cuenta que hay cosas no controlables. 

Al final de lo que se trataba era de poder ofrecer pautas concretas, entre ellas aprender «a diferenciar qué está al alcance de mi control y qué no», partiendo de situaciones como la covid o la crisis económica. Son cosas que no se pueden controlar, pero «sí mi día a día».

Ahí está también el «control de mis pensamientos» porque tenemos que» darnos cuenta de qué nos decimos» porque «hay cosas que no nos vienen bien». Y además, el tipo de información que nos llega es fundamental porque «el cerebro se cree lo que le decimos».

Al final es «un entrenamiento para coger la sensación de nuestro control», donde también son importantes los hábitos de cuidado físico, con ciertas rutinas de cuidado del sueño y alimentación.

Todo ello sin olvidar la parte emocional, porque «cuando tenemos una situación que nos descontrola y desajusta en un momento dado nuestro cuerpo se activa. Hay como una invasión a nivel emocional que nos corta todo pensamiento, nos nos permite pensar adecuadamente» y hay que saber liberar todo eso emocionalmente. Por eso es importante «tenermos paciencia, autocompasión de nosotros mismos, que no es lo mismo que victimizarse», agradecer cada día lo que tenemos y saber disfrutarlo. Intentar ser mejor con nosotros mismos y con los demás porque «hay  que tener esa compasión hacia el otro y la autocompasión hacia uno mismo y hacia los demás».

 En la conferencia pretendía partir del momento en que se recibió la noticia de que íbamos a ser confinados, para llegar a las fases que hemos ido pasando y ver qué experimenta «nuestro cuerpo y a nivel mental en una situación de impacto». Ello teniendo en cuenta que las personas partíamos de momentos distintos y a raíz «de la pandemia se han puesto en relieve muchas problemáticas a nivel psicológico o que ya estaban manifiestas y latentes. Ha sido poner en marcha el fuego para que salga a la luz».

El objetivo era terminar con la parte de «empoderamiento y control de uno mismo, cómo ir ejerciendo esas habilidades o destrezas que nos permitan llevar mejor el día a día en lo que podemos controlar».