"Ávila es una joya a la que la gente no va"

L.C.S
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Entrevista con la economista y profesora universitaria, Isabel Estapé

"Ávila es una joya a la que la gente no va"

Especialista en economía, entre otras muchas cosas, y desde su experiencia como madre de cinco hijos, Isabel Estapé Tous ofrece su visión sobre la situación económica actual, el papel de la mujer y da su opinión en cuanto a las mejores que debería afrontar Ávila para poder mejorar.

El título de la conferencia que ofrecerá el sábado en Sofraga Palacio habla de un cambio de ciclo económico, ¿hacia dónde va ese cambio?

El cambio se debe principalmente a que la gente se ha acostumbrado durante muchos años a vivir sin inflación, con unos tipos de interés muy bajos y unos costes energéticos también muy bajos, pero esto va a cambiar, lo que va a producir una mayor recesión y, sobre todo, una mayor desigualdad social.

Se refiere también en ese título a que habrá luces y sombras.., ¿habrá más luces o más sombras?

Yo soy una optimista nata, y los que nos gusta mucho la Historia y hemos leído bastante sabemos que es cíclica y aunque parece que haya momentos que sean horrorosos luego la Economía sale siempre adelante y termina recuperándose. En este punto va a ser fundamental a ver qué pasa con China, porque afortunada o desgraciadamente dependemos mucho de ese país. Hemos dejado que el mundo occidental dependa mucho de China.

Comentaba antes el tema de la inflación como causante de ese cambio de ciclo, pero habrá alguno más...

Se piensa que es por la crisis energética, pero no es verdad. Esta crisis ha venido a posteriori. El verdadero problema ha venido con los cuellos de botella, porque había muchísima liquidez en el mercado, muchísimo consumo y con la pandemia no se proveía de elementos para la economía, ni de bienes, ni servicios, y se produjo ese cuello de botella que fue lo que disparó la inflación. Los que más o menos estamos metidos en este mundo ya en septiembre de 2019, que no teníamos ni pandemia, ni guerra, ni nada, ya la veíamos llegar. Nos dábamos cuenta de que se estaba produciendo un cambio fundamental en las condiciones económicas.

Se ha referido al papel de China, pero se está poniendo mucho el foco en la invasión de Ucrania por parte de Rusia, ¿hasta qué punto este conflicto y su duración puede influir en la economía?

Influye muchísimo. Lo que pasa es que, nos guste o no nos guste, aquí hay un gran ganador que son los Estados Unidos; un gran perdedor, que es Europa; y luego está China, que no se moja, que ha frenado sus aspiraciones sobre Taiwán al menos momentáneamente, pero que es otra de las grandes vencedoras de esta guerra.

¿Son el paro y la inflación los principales problemas de la economía española, o pensar esto es quedarse en la superficie?

Por un lado sí es quedarse en la superficie, pero yo sé que desde un punto de vista social siempre se piensa que el paro es el principal problema que puede existir en una economía, y si lo piensas desde un punto de vista sentimental y con el corazón, pues es verdad, el paro es lo peor. Pero si lo piensas con la cabeza, desde un punto de vista práctico, lo peor es la inflación. Si la hay todos somos más pobres, no se crece y hace que haya más paro, que muchas veces es consecuencia de la inflación.

¿Qué se puede hacer para mejorar en ambos apartados?

Para empezar, lo primero de todo es que el gasto público se contenga. Es totalmente absurdo que una familia en España necesitaba hace poco el 15% de sus ingresos para pagar su hipoteca, y que el estado necesite el 65% de sus ingresos para pagar la deuda financiera que tiene. Si lo llevamos al consumo, tres cuartos de lo mismo. Es que no puede ser que el Estado esté gastando, y me atrevo a decir despilfarrando, lo que está despilfarrando. Lo primero que hay que hacer es contener el gasto público como sea y luego ya vendrán otras medidas. Y tampoco se puede crujir a la gente en el tema de impuestos porque se quedan ahogados. Hasta hace unos años un español medio necesitaba 140 días del año para pagar los impuestos, hoy en día necesita 211. No tiene ni pies ni cabeza. Esto es una locura.

Pues parece que los Presupuestos Generales del Estado para 2023 no  van por esa reducción de gasto público precisamente...

Es que estos presupuestos nacen muertos de antemano. Se lo ha dicho todo el mundo, del color que sea, al Gobierno. Muchos organismos independientes y muchos estudios de entidades financieras se lo han dicho, pero donde hay patrón no manda marinero. El Gobierno lo fiaba todo a los fondos europeos y a la recaudación absolutamente espectacular que le está viniendo gracias a la inflación, pero Europa ya ha congelado la entrega de fondos por el momento.

¿Qué colectivo social o económico de España sufrirá más en esta situación?

Siempre las clases menos favorecidas son las que más lo sufren, pero yo siempre digo que al final la clase media, que está acostumbrada a vivir con un determinado nivel, es a la que le va a costar más aceptar el cambio.

¿Y hay algún sector que parta en buena posición para poder incluso beneficiarse?

Hombre, beneficiarse, beneficiarse... Muchas veces se piensa que los empresarios se benefician en estas condiciones, y no es verdad, porque ellos son los que crean riqueza. Si no hay empresa privada y comercio sano en el país no se crea riqueza ni empleo. Aquí lo que hay que hacer es ponerse ya manos a la obra lo antes posible. Que alguien se puede beneficiar me parece difícil... en estos momentos es cierto que el sector inmobiliario sigue estando boyante, todavía no ha sufrido, y hay determinados sectores tecnológicos o logísticos que están bien posicionados, pero en general no creo que haya mucha gente que lo pase bien con esta crisis, porque incluso la gente que tiene dinero ahora tiene un 10 por ciento menos.

Otro aspecto que abordará el sábado será el papel de la mujer en esta nueva situación, ¿cuál cree que será?

Al papel de la mujer se le va dando mucha importancia y es muy difícil resumir aquí todo, pero en principio  el trabajo de la mujer es más precario y por eso sufre más cuando hay más paro. Todavía hay diferencias notables en nuestro país entre los sueldos de los hombres y de las mujeres en determinados ámbitos, por lo cual probablemente la mujer sufra más.

¿La conciliación es el mundo actual es posible sin perder algo por el camino?

Debería ser más fácil. Nos estamos quejando del tema de la natalidad y el problema sigue. Aunque suene a una barbaridad lo que voy a decir, si los estadistas mirasen a largo plazo, los dos principales problemas que tiene España en estos momentos son la natalidad y la sequía que tenemos. Sin agua no vamos a llegar a ningún sitio, y sin natalidad tampoco. Lo que pasa es que son dos temas que se tienen que abordar con políticas a largo plazo, y a los políticos nos les interesa el largo plazo porque lo que necesitan es ganar las siguientes elecciones. Todo lo que sea hacer inversiones a largo plazo, pues es muy complicado.

¿Cómo cree que afectará la nueva situación económica a una provincia pequeña como Ávila?

Yo quiero mucho a Ávila, pero creo que vive demasiado encerrada en su Muralla. Yo siempre me pregunto que cómo siendo una ciudad tan maravillosa, tan bonita y que está solo a una hora de Madrid, pues sea menos conocida, menos rica y menos turística que Segovia o Toledo, por ejemplo. En esto influye bastante que al abulense creo que no le gusta tener demasiado turismo. Evidentemente que la nueva situación le va a influir a Ávila, y más que a otras ciudades. Basta con mirar cómo está el precio inmobiliario en Ávila, que está muy bajo, aunque es verdad que con la pandemia ha habido muchas transmisiones y la gente ha comprado más en ciudades cercanas a Madrid. Esa debería ser una de las cosas que tendría que impulsarse de Ávila, que más gente de la que teletrabaja se vaya a vivir a Ávila.

¿Y qué más debería potenciarse desde Ávila para tener una mejora en el panorama económico?

Sin lugar a dudas el sector turístico. Ávila es una joya a la que la gente no va. Los turistas que llegan a Madrid van en un tercer o cuarto lugar a Ávila, y ese apartado habría que fomentarlo muchísimo más, y de muchas maneras, como con el tema gastronómico. Como mínimo habría que conseguir que los turistas que vienen a Madrid pasasen el día en Ávila, ya no digo que duerman, pero sí que al menos lo pasen. Para eso hacen falta campañas y campañas de promoción.