Los alcaldes de Candeleda y de Madrigal de la Vera y Jaraíz de la Vera, localidades cacereñas muy próximas a la abulense, mantuvieron una reunión este viernes en el salón de Plenos del Ayuntamiento candeledano para la puesta en común de propuestas y enfoques de los diversos aspectos de la gestión municipal que se deberán abordar de cara al verano, a medida que las distintas fases de desescalada lo vayan permitiendo, entre ellas el acceso a las zonas de baño de las piscinas naturales de ambos municipios, la reapertura de los mercadillos ambulantes y la celebración de los festejos.

Además de Carlos Montesino, Urbano Plaza y Luis Miguel Núñez, regidores de las tres localidades, participaron en este encuentro por parte candeledana la teniente alcalde, Susana Martín Campos; el concejal de Urbanismo, Miguel Hernández Alcojor y la edil de Asuntos Sociales y Gobernanza Municipal, Carolina Nogal Plaza; por Madrigal, el teniente de alcalde José Manuel Ramos Carreras, y por Jaraíz, Rufo Sánchez Granado.

Los ediles explicaron sus posiciones en torno a estos asuntos, coincidiendo en la importancia de respetar las medidas sanitarias indicadas por el Gobierno y compartiendo propuestas para estar preparados para la próxima llegada de turismo de interior que, en verano, incrementa la población en estos municipios de manera sensible llegando a duplicarla.

El alcalde de Candeleda, Carlos Montesino Garro, aseguró que «se irán adoptando medidas de acuerdo a las indicaciones sanitarias para garantizar que el control de la epidemia de la COVID-19 sea efectivo» y apeló a la «responsabilidad individual» de los ciudadanos, llamándoles a «evitar relajarse en el empleo de las medidas de protección individual y de distanciamiento social indicadas por las autoridades sanitarias, pues esto es fundamental para que se pueda ir volviendo poco a poco a la normalidad».