El Programa de Mayores de Crur Roja atendió en Ávila el último lustro a 10.531 personas y de todas ellas, 2.251 fueron atendidas el año pasado, cuando se llevó a cabo 51.519 intervenciones.

Estas dos últimas son cifras más bajas que las registradas en 2019, cuando los usuarios de este progama fueron 2.409 y se llevaron a cabo 75.387 intervenciones.

Pero que nadie se lleve a engaño. Esto no quiere decir que en 2020, el que será recordado como el año de la pandemia, Cruz Roja bajara el ritmo a la hora de atender a los más vulnerables.

Al contrario. Tal y como se encarga de recalcar Nieves Azañedo, si las cifras reflejan un descenso es única y exclusivamente por la bajada de actividad grupal motivada por el confinaminento domiciliario y la imposibilidad de llevar a cabo actividades grupales.

«Es cierto que la actividad cayó mucho, porque durante meses no hubo talleres grupales ni visitas», explica la responsable del Programa de Mayores. Pero, en cambio, se multiplicó la actividad en otros frentes que no tienen su reflejo en las cifras puestas sobre el papel.

La atención teléfónica, por ejemplo, se disparó durante todo el año. «Pero la contabilidad de estos datos es más compleja», aclara Azañedo.

Las llamadas para paliar la soledad de los mayores que viven solos o para prestar apoyo psicológico  a las personas que los cuidan se multiplicaron durante el año pasado. «Pero también hubo llamadas dentro de las actividades relacionadas con la estimulación cognitiva o para atender temas relacionados con consejos de higiene, de resiliencia ante la covid, con el estrés... E incluso con el ejercicio físico», expone Azañedo la importancia que el teléfono tuvo para Cruz Roja y los mayores el año pasado.

Un trabajo, el telefónico, que palió muchas necesidades entre las familias pero que para los voluntarios supuso un sobresfuerzo añadido.

Pero ese esfuerzo, continúa hablando nuestra interlocutora, encontraba recompensa con las palabras agradecidas que recibían de los mayores al otro lado del hilo telefónico. «Para ellos, nuestras llamadas eran una inyección de vitalidad», recuerda esos momentos Azañedo, que habla de los 205 voluntarios que el año pasado se volcaron en algún momento y en distintos puntos de la provincia con el Programa de Mayores de Cruz Roja.

MÁS CIFRAS. Volviendo a las cifras y a los 10.500 mayores atendidos por Cruz Roja Ávila en el último lustro, podemos apuntar que en 2017 la cifra de beneficiarios de este programa fue de 2.469 personas, con las que se llevaron a cabo 93.684 intervenciones.

Y en 2016, la cifra de mayores se quedó en los 2.128.

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