Polémica por el futuro de la estación de autobuses

L.C.S
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El PSOE insta a XAV y Cs a que «aclaren si tienen algo que esconder» ante la decisión de declarar en ruina el edificio, que quiere que «no pase a manos privadas, sino que siga perteneciendo a los ciudadanos»

Polémica por el futuro de la estación de autobuses

La cuarta moción de la sesión plenaria de este mes tuvo como objeto de debate el futuro del edificio de la antigua estación de autobuses, que evidenció un nuevo encontronazo entre el equipo de gobierno de XAV y Cs y la oposición de PP y PSOE.

Fue el grupo municipal socialista el que se interesó por la cuestión, pidiendo que el Ayuntamiento se comprometiera a que ese edificio, «que no se está cayendo», según palabras de la portavoz socialista, Yolanda Vázquez, «siga siendo patrimonio de los abulenses, no pase a manos privadas, y acoja un proyecto social y público, tal y como», recordó, «aparecía en el programa electoral de Por Ávila», y es que desde el PSOE se preguntan si es que «tienen algo que esconder desde el equipo de gobierno» ante un posible interés de que el edificio acabe en manos privadas.

El Partido Popular aportó en este debate que «se consulte a la población abulense sobre el futuro de este espacio» y afeó al equipo de gobierno el hecho de que «lleven ya año y medio al frente del Ayuntamiento y todavía no tienen ningún proyecto definido».

Por su parte, desde Por Ávila su portavoz José Ramón Budiño, defendió que «el Ayuntamiento a lo que se compromete es a que la antigua estación de autobuses acoja un proyecto que genere riqueza y beneficio para la ciudadanía y los abulenses», comentando que «no tiene que ser solo un proyecto social o público» y pidiendo al Gobierno que «nos ceda el espacio de una vez por todas para empezar a trabajar».

Por último, Carlos López, portavoz de Ciudadanos, recordó que «cuando la Junta dejó de gestionar el edificio el Estado no se preocupó de nada en lo que a su conservación se refiere». Para López, «el proyecto público» no tiene encaje «porque a ver quién lo paga, el Ayuntamiento desde luego que no porque no tiene dinero para ello» y por eso «hay que abrir la puerta a la colaboración público-privada».