Prosiguen las actuaciones institucionales para que la Academia de la Unidad de Emergencias (UME) se instale en la localidad abulense de Cebreros.

En esta ocasión, el vicepresidente del Gobierno autonómico, Francisco Igea, y el alcalde de Cebreros, Pedro José Muñoz, han remitido una carta conjunta a la ministra de Defensa, Margarita Robles, para solicitar una reunión en la que poder abordar este asunto, entendiendo, se asegura desde la Junta, que supone una gran contribución para dinamizar demográficamente esta zona. 

De esta manera, Junta de Castilla y León y Ayuntamiento de Cebreros recuerdan la petición formulada por este último, hace ya tres años, junto con el compromiso por parte del Gobierno de España para llevarlo a efecto.

En la misiva conjunta, el vicepresidente autonómico y el alcalde de Cebreros reiteran el alcance para la dinamización demográfica de la zona que supondría el establecimiento permanente de la Unidad Militar de Emergencias, con la finalidad de combatir incendios y hacer frente a situaciones de diverso riesgo para personas y bienes, junto con el traslado de la academia de formación de esta unidad militar. 

Ambos responsables públicos advierten, no obstante, de que ante los denominados «presupuestos más expansivos e inversores de nuestra historia reciente», no se halla respuesta ni sustento para la materialización del compromiso contraído, dejando fuera la posibilidad del establecimiento en la provincia de Ávila de la Academia de la Unidad Militar de Emergencias.

Por ello, Igea y Muñoz han trasladado a la ministra de Defensa un nuevo ofrecimiento por parte del Ejecutivo autonómico para colaborar y apoyar proyectos que contribuyan a la mejora de la situación demográfica de Castilla y León, cuestión que en este caso concreto afecta al municipio de Cebreros y su entorno, dentro de la provincia de Ávila.

Esta nueva carta llega poco tiempo después de que Igea se dirigiera formalmente a la ministra de Defensa sugiriéndole que «siguiendo los criterios de descentralización» la Academia de la UME, que actualmente se encuentra instalada en Madrid, se traslade a Ávila.

En aquella ocasión, el vicepresidente de la Junta apoyaba su argumentación en el ejemplo de la sede de la Escuela de la Policía Nacional, ubicada en Ávila capital.

Esta primera comunicación tuvo lugar el último día de julio.En aquella misiva, Igea ya sostenía que este cuerpo no sólo podría tener funciones de lucha contra los incendios forestales de la provincia y los territorios limítrofes, sino que podría «hacer frente a todo tipo de situaciones en las que la vida o la integridad de las personas y de sus bienes, el medio ambiente, los espacios naturales y sus recursos y el patrimonio histórico-artístico puedan resultar afectados».

De este modo, desde la Junta de Castilla y León se lanzaba el guante a Margarita Robles, que encabezó la candidatura socialista por la circunscripción abulense y que en campaña electoral anunció que su departamento daría «una vuelta» a la Unidad Militar de Emergencia para que tuviera más presencia en Ávila y, concretamente, en Cebreros, donde este año el quinto Batallón de Intervención en Emergencias (BIEM V) desarrolló un ejercicio de entrenamiento para hacer frente a la campaña de incendios forestales. Aunque la carta, eso sí, se remitió antes del fuego que asoló la sierra de La Paramera a mediados de agosto.

Conviene apuntar que La Escuela Militar de Emergencias, creada haca poco más de cuatro años, en 2017, tiene sus instalaciones en Torrejón de Ardoz con el objetivo de impartir tanto a personal militar como civil, enseñanzas asociadas con los supuestos de grave riesgo, catástrofe, calamidad u otras necesidades públicas. 

Su instalación en Ávila sería un paso en el objetivo de convertir la provincia en un polo de estudio y capacitación en materia  de seguridad nacional y pública, de las que son ejemplo la Escuela de la Policía Nacional y la Escuela Regional de Policía Local.