Las familias vulnerables de Castilla y León contarán antes de que acabe el año con una ayuda para combatir la pobreza energética. Los 130 euros que conformarán este nuevo bono social autonómico servirán para hacer frente a los recientes incrementos en el precio de la luz y del gas con el objetivo de que ninguna familia se quede desabastecida de energía. Así lo anunció ayer el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, que reveló que «antes de final de año» 45.000 familias vulnerables de la Comunidad recibirán una ayuda extraordinaria de 130 euros para hacer frente a «la subida desproporcionada de la luz y otros combustibles». El máximo dirigente de la Comunidad realizó este anuncio durante su intervención en un acto que ha tenido lugar en el centro asociado de la UNED en Zamora.

Esas ayudas, por importe de seis millones de euros, llegarán a 45.000 familias, entre ellas, las de menos recursos, que perciben la renta garantizada de ciudadanía y personas mayores con pensiones no contributivas. «Se va a ingresar directamente a estas familias, que tenemos identificadas, entes de final de año y sin tener que hacer tramites de solicitud», puntualizó Fernández Mañueco. «Mi gobierno protege a las personas de Castilla y León. Ninguna familia, sin luz ni sin calefacción, por dificultades económicas. La subida desproporcionada de los combustibles, que son fundamentales, pone en dificultades a muchas familias y mi gobierno va a estar a su lado. Algunas ideas están funcionando; otras, se van a incrementar, como novedades, y otras, se van a reforzar», aseguró el presidente de la Comunidad durante su intervención.

Además, quiso hacer hincapié en que esta es solamente una de las medidas que pondrá en marcha el Gobierno autonómico para «luchar contra la pobreza energética». «No hace falta explicar la situación que estamos viviendo en nuestro país. Hay familias en muchas dificultades y mi Gobierno protege a las personas», advirtió.

Entidades locales

Por otra parte, el Ejecutivo autonómico aumentará en ocho millones de euros las partidas destinadas a las entidades locales, que ya cuenta con líneas subvencionadas por la Junta para ayudas de emergencia a familias con necesidad. «Crearemos una nueva línea de ayudas dentro de esa política, en colaboración con las corporaciones locales, por la subida de suministros de calefacción», detalló Mañueco, que avanzó que éstas las tramitaran las entidades locales y desde la Junta incrementaran las cantidades que destinan a las corporaciones locales: «cuatro millones este año y otros cuatro, el año que viene», anotó.

El presidente de la Junta anunció también que se reforzarán los convenios con las empresas suministradoras «para evitar cortes por impagos a familias en situación de dificultad económica». De esta forma, ya se están renovando los acuerdos con Iberdrola, Naturgy y Repsol, al tiempo que se prepara un convenio para incorporar a Endesa. «Es una línea que saca de apuros a muchas familias, más de 400, el año pasado, a las que se evita el corte del suministro», indicó.Además, la Junta gestionará el bono térmico para las familias, por un importe pendiente de consignación presupuestaria, según los Presupuestos Generales del Estado para 2022.

Pendientes de las familias

El número uno del Ejecutivo autonómico lanzó el mensaje de que, «ante la subida de la luz, del gas y de los combustibles, en general», el Gobierno que preside «protege a las personas que pasan por dificultades», y apostilló que «no vamos a dejar a nadie tirado, en estos momentos de gran incertidumbre económica y social». Por último, hizo hincapié en que la Junta estará «pendiente de las familias que más lo necesitan» con las cuatro líneas de ayuda descritas. «Tenemos unos servicios sociales de primera, entre los mejor valorados de España, por iniciativas como esta, por estar al lado de las personas», rubricó.