Álvaro Mateos

El Valtravieso

Álvaro Mateos


Requiem por Magalia

13/02/2023

Ante el inicio de la semana marcada por el Día Mundial de la Radio, uno no puede olvidar aquellos primeros años de ilusión en la apertura de una emisora como fue COPE en Ávila, hace ya 23 años. Una época en la que todavía quedaban amplias franjas de programación local con historias, cultura, tertulias, e incluso el encuentro con los niños en Venero Claro. Entonces, García hacía sus últimos programas de deportes y hasta Ávila llegaba la negociación de su futuro, porque Bernardo Herráez andaba por aquí y estábamos en medio del meollo de lo que se pretendía hacer con la cadena en unos momentos inciertos. Estábamos en medio del meollo. Atrás quedaban años de lucha desde las ondas que García y los dos Herreros habían denominado antenicidio. 
Pues bien, hoy este Valtravieso salta al Magalicidio del Ministerio de Cultura en Las Navas del Marqués; el mismo al que últimamente todo cuanto tenga que ver con Ávila le produce cierta inquina. Lo del Prado Abandonado de Iceta lo dejo para otro día, pero ya de paso recuerdo que Magalia tiene fondos del museo, ahora ya sin nadie que los pueda contemplar. 
Ya en noviembre, me referí a la tropelía que se estaba cometiendo con el castillo sin una solución adecuada y lo peor es que, tras las tibias e infundadas explicaciones dadas por los responsables, Magalia lleva ya cerrado a cal y canto desde el pasado jueves sin ofrecer nadie ninguna respuesta. Los trabajadores del palacio, en el aire desde hace ya meses, no han recibido propuestas en firme y no hay nada claro en torno a posibles traslados o reubicaciones. 
Ese es el lamento que se oye hoy en los muros históricos del Castillo: «¿Magalia dónde vas?», mientras algunos quisieron entregarlo a fiestas tecno, fines de semana de mus y otras muchas insensateces, desaprovechando un entorno que no han sabido gestionar, que les ha quedado grande y vacío. A mí se me siguen ocurriendo muchas soluciones y, estoy seguro que si alguna administración se lo toma en serio, las encuentra. 
Doy fe, porque hace cinco años lo llegué a publicar, que el Ayuntamiento de Las Navas tenía prácticamente en su mano quedarse con el edificio. Siendo  del municipio, no habrían faltado apoyos de la Junta de Castilla y León y la Diputación Provincial. Actividades para albergar, también las hay;  empresas de restauración y hostelería para darle una utilidad de negocio, tampoco. En vez de un cattering lejano y ajeno, ¿por qué no los fogones de Alberto Rosado, distinguido con premios Repsol? ¿Por qué no las brasas de su tocayo restaurante Magalia a la entrada del municipio? ¿O la cocina de Mari Paz y Jose, de La Parrilla? 
¿Qué es lo que pasa con el Castillo de Magalia? ¿A quién le interesa su cierre? ¿No va a protestar nadie en Las Navas del Marqués? ¿De verdad que las administraciones se van a quedar de brazos cruzados? ¿Qué ocurre con los empleos directos e indirectos que genera? Son cinco preguntas que nadie responde y no lo entiendo, porque, por mucho que el Ayuntamiento asegure que las visitas turísticas seguirán, es lógico pensar que la falta de mantenimiento y el deterioro del cierre van a ir en contra de la conservación de un emblema de Las Navas del Marqués. 
«Magalia Quondam»: Esto no puede quedar así. Son muchas las instituciones las que he aludido y espero alguna solución al respecto. Es inadmisible el abandono del castillo y sus trabajadores.