Este 2022 es un año especial para la Universidad Católica de Ávila (UCAV), que cumple 25 años. También para su rectora, María del Rosario Sáez Yuguero, que ha estado al frente de la misma desde 2007 y en un tiempo que ha sido decisivo para el despegue de esta universidad. 

Pregunta obligada, ¿qué balance hace de los 25 años  de esta universidad?

Es verdad que 25 años no son muchos para una universidad pero hemos visto como de ese sueño de don Antonio Cañizares, que fue apoyado por toda la sociedad abulense porque se veía como una necesidad para Ávila, hemos ido consolidándonos, creciendo y haciendo de la UCAV una universidad de calidad y de altura científica, y todo ello manteniendo nuestra identidad católica que es el hecho diferenciador respecto a otras universidades. 

Creo que este aniversario es una enorme gratitud a todos los que hicieron posible esta universidad y a toda la comunidad universitaria que con tanta ilusión trabajamos por ir creciendo y mejorando. La plantilla de profesores ha ido creciendo, tanto en edad como en currículum, acreditaciones y adquisición de sexenios de investigación de tal forma que actualmente la inmensa mayoría de nuestros profesores son doctores. 

¿En cifras, ese sueño que empezó a gestarse a finales de la pasado siglo en qué se ha materializado?

A día de hoy la universidad tiene 4.500 alumnos en títulos oficiales y hasta 7.000 en títulos propios. Y en cuanto al personal, somos más de 300 personas en plantilla, de los cuales unos 210 son profesores y el resto personal de administración, sin contar los profesores que colaboran en la impartición de másteres, prácticas o seminarios. 

La UCAV es, de hecho una de las principales empresas privadas de Ávila...

Sí, si no la más importante una de las mayores. Hemos contribuido a que muchas familias, de profesores o personal de administración, estén viviendo en Ávila y esto es muy importante. En estos 25 años la universidad ha contribuido al desarrollo de la ciudad y ese fue de hecho uno de los motivos para que don Antonio Cañizares impulsara esta universidad al entender que Ávila necesitaba una universidad para crecer. 

Siempre he pensado que Ávila es un sitio idóneo para ser ciudad universitaria y tal vez falta un poco más de visión y empuje por parte de nuestros políticos locales y regionales.  

¿Y en qué medida la UCAV ha contribuido a que los jóvenes de Ávila no tengan que marcharse?

Entre el 25 y el 30 por ciento de nuestros estudiantes son abulenses y eso es muy importante porque eso hace que después se puedan quedar aquí y de hecho muchos de nuestros trabajadores estudiaron aquí. De hecho, la UCAV cuenta con becas y ayudas al deporte para fomentar que no se tengan que ir fuera y por otra parte hemos ido aumentando la oferta académica de modo que cualquier joven abulense tiene aquí una buena oferta para estudiar,  y económicamente le va a costar lo mismo o menos que vivir fuera y tal vez estudiando aquí, incluso, tengan más éxito. No en vano, aquí se trabaja mucho la formación integral de los alumnos y que todos tengan un tutor personal, siendo de hecho una de las mejores universidades del país en cuanto a empleabilidad de nuestros alumnos. Y eso es debido a la buena formación de nuestros alumnos. Hoy se valoran más algunos aspectos de la formación humana que el currículum. 

Recientemente Forbes situaba a la UCAV entre las 20 mejores universidades de nuestro país para estudiar...

Eso es un motivo de satisfacción y viene a reconocer nuestro esfuerzo en la formación de nuestros alumnos en empleabilidad y también en temas de investigación. De hecho, en la UCAV estamos fomentando mucho la investigación porque era un punto débil hasta hace unos años pero actualmente nos estamos poniendo en un nivel importante gracias a la formación del profesorado  y la enorme inversión económica tanto en laboratorios como en los propios proyectos de investigación. 

¿Cuáles son los principales objetivos a futuro?

El reto es ampliar nuestra oferta académica y estamos esperando que nos autoricen la impartición de Farmacia y también aspiramos a poder contar algún día con una Facultad de Medicina, lo que no es fácil porque se requiere de un hospital. Además de aumentar la oferta académica nuestros objetivos pasan por tener un buen desarrollo en el ámbito de la investigación, ampliando también el número de doctorados y la creación de una escuela de Doctorado, en la que ya estamos trabajando. 

Echando la vista atrás, ¿cuáles diría que han sido los hitos de esta universidad?

Para nosotros fue muy importante la transformación digital, la enseñanza a distancia, que comenzamos hace diez o doce años y que nos abrió las puertas a tener un número mayor de alumnos; eso fue clave como también lo fue el aumento de las titulaciones. Hace quince años, cuando yo llegué, la UCAV tenía ocho titulaciones y nada de Ciencias de la Salud ni de Humanidades y el ampliar estas titulaciones nos ha permitido tener más alumnos, más recursos y mejorar la investigación. 

Gracias a esa transformación digital entiendo que la UCAV no tuvo problemas para seguir trabajando durante la pandemia...

La pandemia nos pilló completamente adaptados a la enseñanza on line. Es más, hemos ayudado a multitud de empresas y entidades a llevar a cabo esa transformación digital de modo que durante la pandemia fuimos capaces de impartir seminarios de formación digital que han cursado más de 100.000 profesores de todo el mundo. 

¿Se puede seguir creciendo, y hacía dónde?

Sí, claro que se puede seguir creciendo, en este caso en titulaciones que sean más presenciales y también en algunos másteres, en los que se ha aumentado el número de plazas. Y también nos gustaría consolidar las Humanidades. 

Para usted este 2022 también es importante porque se cumplen 15 años al frente del Rectorado de la UCAV, ¿de qué se siente más orgullosa?

Una universidad es un proyecto muy amplio en el que trabajamos muchas personas. En este caso yo lidero ese proyecto pero si no hay una respuesta de toda la comunidad universitaria, como no haya personas comprometidas e implicadas, los proyectos no salen. 

Personalmente estoy muy satisfecha porque cuando llegué aquí, en 2007, la UCAV estaba en un momento muy crítico, casi en la UCI, y hoy está en plan atlético total y esto ha sido gracias no solo a los equipos de gobierno sino toda la comunidades universitaria. Llegué con mucha esperanza pero con mucha incertidumbre y, gracias a Dios, estamos cumpliendo esos objetivos. 

¿Cómo va a celebrar la UCAV estos 25 años?

Además de la gala de este jueves, que se titula 'Gracias, Ávila', y que es un agradecimiento a la ciudad y a todas las instituciones con las que colaboramos y tenemos alianzas, que son muchísimas, hay otra serie de actos como los fuegos artificiales, conciertos, celebración con antiguos alumnos y profesores, una escuela de otoño, deporte.... va a ser un año intenso y especial en el que queremos celebrar con todos los abulenses que estamos aquí y somos la universidad de Ávila.