La revista Campo Castilla y León y la Diputación de Ávila organizaron este miércoles en Ávila un encuentro Agroprofesional para hablar del vacuno de carne. Un foro para hablar de los problemas del sector, pero también de las soluciones y sobre todo para acabar poniendo en valor al productor, pero siempre que se hagan las cosas bien, atendiendo a las exigencias medioambientales y a las del consumidor final, además de a las de la industria agroalimentaria que es la que acaba poniendo los productos en los lineales. De algún modo se trata de que «esto sea un negocio, para todos, no sólo para los que venden, también para los que producen», sintetizaba el director de la revista Campo Castilla y León y moderador de la jornada, Máximo Gómez. Una jornada, que despertó gran interés y que se desarrolló en las instalaciones que Naturávila, propiedad de la Diputación. Precisamente el presidente de la institución provincial, Carlos García, se encargó de inaugurar el foro y lo hacía con un alegato en defensa de un sector sin duda de gran importancia para la provincia y que se comprometió a seguir apoyando. Entendía Carlos García que «Hablar de Ávila y no hacerlo de carne sería un gran error y más si no lo hacemos del vacuno». Y es que se refería a las más de 400 explotaciones de ganado vacuno de Raza Avileña que congregan a más de 22.000 reses en este territorio, una apuesta desde luego que agradecía y ponía en valor. Y lo hacía puesto que  «día a día dan lo mejor de sí» y además «si crece el vacuno, mantenemos población, generamos riqueza, generamos empleo y en este caso además generamos calidad», algo que sin duda distingue al vacuno avileño.

Destacó además que el encuentro serviría para el análisis tanto de experiencias como de necesidades y planes de futuro de un sector, sin duda, «prioritario» para algunas administraciones, en referencia a la que él representa. 

Una posición la de Diputación que, desde luego, «no es igual en otras administraciones» que, -sin decir el nombre- incluso lo que hacen es «criminalizar» al sector, tanto a la ganadería extensiva como a la intensiva, manifestó. 

Estos encuentros deben servir, aseguraba, «en clave de progreso y de propuestas y no, de protestas.Sí también y muchas veces, de reivindicaciones, tan necesarias cuando hay que levantar la voz». 

No obvió el comportamiento ejemplar de los profesionales del vacuno durante la pandemia, al igual que los agricultores y los ganaderos que «han dado siempre lo mejor de sí para algo tan necesario como que no falte ningún alimento de calidad en la mesa».

Por su parte el director de la revista y organizador del encuentro Máximo Gómez entendía que este tipo de encuentros agroprofesionales lo que buscan es «encontrar la ley de la cadena alimentaria y sobre todo dos eslabones muy importantes de ella como son la producción y la industria agroalimentaria».

Se trata del sexto encuentro que se organiza y en Ávila la lógica llevaba a actuar y a fomentar que se hable de carne y se hable de vacuno y por lo tanto de eso trataba la cita.

Se trataba, como decíamos, de poner los problemas sobre la mesa pero también de buscar soluciones teniendo en cuenta la profesionalidad del productor. Una profesionalidad que da pie a su puesta en valor. Ese paso debe darlo «a través de una industria agroalimentaria que es muy exigente pero que es la que pone el producto en los lineales y atiende las exigencias de los consumidores». 

Diputación y Campo Castilla y León no han estado solos en el desarrollo del encuentro ya que han contado con otros colaboradores como Banco de Santander, Vitartis  y la Junta de Castilla y León a través del Itacyl. En definitiva empresas que en palabras de García muestran «día a día su compromiso con el sector agroganadero y no solamente de Ávila sino también  de Castilla yLeón»