Ayuntamiento y vecinos de El Hoyo de Pinares siguen haciendo frente a las duras consecuencias que deja el terrible incendio que este verano asolaba el término municipal. Después de semanas sin lluvia, había incertidumbre por saber cómo afectarían las primeras tormentas y cómo funcionarían los sistemas de retención de cenizas colocados por la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT).

Puestos en contacto con el alcalde de la localidad, David Beltrán, éste confirma a Diario de Ávila que esos sistemas de retención han funcionado correctamente, si bien hay que tener en cuenta que la manera en que ha caído el agua en estas primeras tormentas ha sido «continua y no muy fuerte», lo que, sin duda, ha ayudado a que las cenizas no hayan llegado aún en grandes cantidades ni al embalse ni a la potabilizadora hoyanca.

Una potabilizadora, la antigua, que es la que en este mismo momento está haciendo el trabajo de filtración del agua, tal y como también explica Beltrán. «Éste fue el sistema que ideamos para dar a la población servicios básicos tras el incendio», se remonta en el tiempo el alcalde, que explica también que este equipo no cuenta con los sistemas de ozono de los que sí dispone la potabilizadora nueva, ahora fuera de servicio. «Hemos metido filtros de arena de sílice», prosigue con sus explicaciones Beltrán, que si algo quiere dejar claro es que el Ayuntamiento se encuentra en todo momento vigilando la calidad del agua que sale de los grifos de los hoyancos.

En este sentido, el Ayuntamiento ha encargado un análisis de hasta 52 parámetros de calidad del agua hoyanca. «Conoceremos los resultados a finales de la semana que viene», anuncia Beltrán, que quiere tener las garantías de que el agua que beben y con la que se duchan sus vecinos cumple en todo momento las garantías higiénico y sanitarias que se precisan.

«Porque si esos parámetros no fueran los correctos, en 24 horas tendríamos que solucionarlo», prosigue hablando el alcalde hoyanco, que insiste en que en esta ocasión los sistemas de retención de la CHT han funcionado. Pero que tiene muy claro que a lo largo de los próximos meses la lluvia no caerá de forma tan pausada, sino que lo hará de manera más torrencial.

Y será entonces cuando es más que probable que esos sistemas de retención no sean suficientes. «Somos conscientes de que en algún momento va a ocurrir que tengamos que suministrar agua embotellada», tiene claro el alcalde, que se refiere a ese momento en que la fuerza de las lluvias haga imposible emplear la potabilizadora antigua para filtrar todo el agua.

Y es que, el Ayuntamiento de El Hoyo de Pinares cuenta en la actualidad, como decíamos, con una potabilizadora antigua y con una nueva. La antigua se empleará cuando el agua que entre lleve ceniza. «Si viniera sin ceniza, el agua se pasaría por la nueva», apunta Beltrán, que avanza así el sistema de rotación de equipos que el Consistorio tiene previsto para no sólo garantizar la calidad del agua de grifo sino, también, para garantizar la seguridad de unos equipos tan necesarios en estos momentos.