Cuando el trabajo da sus resultados «es para estar contentos» y en la DelegaciónProvincial de Baloncesto tienen motivos más que sobrados para estarlo. «Se está meneando el árbol y están cayendo los frutos» dice de manera coloquial Raúl Álvarez, delegado provincial en un inicio de curso 2022-23 prometedor en lo que a baloncesto provincial se refiere.Porque en la nueva temporada que ya asoma a la vuelta de la esquina se volverá a hablar tanto de la Liga Mini Provincial como de la Liga Sénior 3x3, pero también darán que hablar la que quiere ser nueva Liga Infantil Provincial o la Liga Sénior 3x3 Alberche-Tiétar, las dos nuevas propuestas que trata de convertir en realidad la DelegaciónProvincial de Ávila. Y todo ello será posible gracias a los árbitros, una figura en muchas ocasiones injustamente denostada por muchos, maltratada por todos pero que es el elemento fundamental para que en el parqué abulense el balón sea el protagonista. Una figura que estuvo en 'crisis' y que trata de recuperar poco a poco la DelegaciónProvincial de Baloncesto. Y lo está consiguiendo.    

«Estábamos en una situación crítica» reconoce Raúl Álvarez. «Cuando entramos en la DelegaciónProvincial –en septiembre de 2019 tomó el relevo de Juanjo Bernabé– había siete árbitros en todo el comité abulense». Tocaba remangarse, porque el número ponía todo el engranaje en serio riesgo. Ya se observó un evidente cambio de tendencia el año pasado, cuando el Curso de Árbitros y Oficiales de Mesa reunió a un total de 14 inscritos.  Con el paso de los meses dos causaron baja, pero el número era importante. Pero este año se han superado todas las cifras. El reciente curso de iniciación al arbitraje registró un total de 19 inscritos, a los que se han unido con el paso de los días otros cuatro. «Tenemos 23 inscritos, una barbaridad. Estamos encantados» comenta sin tapujos Raúl Álvarez, que tiene muy claro que «desde que soy delegado es la mejor noticia que hemos tenido.  Por encima de sacar cualquier competición, cualquier liga Mini o Provincial,  ésta es la mejor noticia con diferencia».

Puede pasar desapercibido de puertas hacia afuera, pero era fundamental levantar la cuestión del arbitraje en Ávila. «Sin árbitros no puedes sacar adelante ningún tipo de competición ni hacer absolutamente nada» señala Álvarez, que se ha movido en todos los sentidos –no sólo la puesta en marcha de cursos de aprendizaje– para hacerlo posible. No han faltado incluso reuniones con padres, un eslabón muy necesario cuando se trata 'devolver' la dignidad a la figura del árbitro y hacerlo desde el baloncesto de base. «Les he pedido a los padres que cuiden a los árbitros, que los respeten, que no les insulten, que no les piten... Porque son una parte fundamental de las competiciones de sus hijos. Es verdad que la figura del colegiado debe tratar de pasar desapercibida en los partidos, pero es que sin ellos estamos muertos. Es una realidad. Sin árbitros no se puede hacer nada». Necesita la colaboración de los padres. Ya el curso pasado la competición de los Juegos Escolares dejó incluso algún desafortunado 'incidente' de esos que llevan a pensar que es mejor que los padres se queden fuera de las instalaciones.

Todo ello no ha sido una labor única de la DelegaciónProvincial, sino de muchos. «Puede que sea una coincidencia, pero hubo un cambio de presidente al frente del Comité de Árbitros en Ávila que supuso la entrada –Fernando López– de una persona más joven que entró con mucha fuerza y muchas ganas. Todo eso ayuda y se nota». Se remangó también el Óbila Club de Basket, conocedor al detalle de la situación. «Sabían que si no éramos capaces de sacar árbitros todo se iría al garete». Consiguieron entre todos comenzar a mover la rueda y poner en marcha una «espiral» contagiosa. «Empezaron entrando chavales del júnior y el cadete femenino y con ellos  siguieron todos los componentes del equipo. Llegó también gente que se había desenganchado... Comenzó un boca a boca y todo ha sido más fácil». La imagen de un arranque de curso con gente joven a la cabeza ha sido un soplo de aire fresco.

Con árbitros, toca hablar de competiciones. Y este año hay novedades y ganas de crecer. Fue un éxito la I edición de la Liga Sénior 3x3 Mixta, una competición tantas veces buscada y deseada en los últimos años que por fin veía el año pasado la luz. «Vamos a ver este año hasta dónde nos da». Se ha abierto el plazo de inscripción –a través del teléfono 637 773 331 o delegaciónavila@fbcyl.es– con una idea clara. «Si podemos hacer dos divisiones, las haremos».El año pasado fueron 12 los equipos participantes. «La idea para este año es hacer dos categorías.Para los que quieran algo más lúdico, de ocio y menos competitivo estaría la Segunda División y para aquellos que quieran competir estaría la Primera División. Si no pudiera ser posible, haríamos una única división con más equipos. Todo apunta a que tendremos algún equipo más que el año pasado, pero habrá que verlo».

Quiere crecer la liga en Ávila capital pero también en la provincia, donde este año la Delegación pone en marcha la Liga Provincial de Baloncesto Alberche - Tiétar 3x3. Ya se venía dando vueltas al proyecto, pero fue la celebración del último 3pa3 El Tiemblo el que acabó por suponer el empuje definitivo. «Nos acercamos y los participantes nos pidieron una liga para la zona... Se ofrecieron de inicio cuatro equipos. A partir de ahí, a moverse. En la zona de El Tiemblo, Las Navas, El Barraco... Por decirlo de alguna manera tenemos ya apalabrados 8-9 equipos para empezar» apuntan ante un periodo de inscripción que abarca hasta el 9 de octubre y que hace pensar que será posible.

Llegará el momento de hablar de la LigaProvincial Mini y quizás sea acompañada por la Liga Provincial Infantil, un nuevo proyecto en el que ya es están moviendo.

Está dando sus frutos el trabajo que en los últimos años se viene haciendo desde la Delegación Provincial de Baloncesto. «Para muchos soy la parte más visible pero hay mucha gente detrás echando muchas horas de manera altruista para que todo esto sea posible» reivindica Raúl Álvarez, que cree que la pandemia puede haber sido un empujón inesperado. «La covid nos hizo parar durante dos años, pero estamos viendo ahora que la gente tiene ganas de participar, de hacer cosas, de hacer deporte... Puede que incluso nos vaya a beneficiar».