«Los tatuajes muestran cómo evoluciona tu vida»

M.M.G.
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Podría decirse que por las venas de Aitor Romero corre tinta en vez de sangre. Su pasión desde la infancia fue el dibujo y ahora, unos años después, la desarrolla a diario sobre la piel de sus clientes en su estudio Black Sunrise Tatoo and Piercing

«Los tatuajes muestran cómo evoluciona tu vida»

Nuestro protagonista de hoy es el claro ejemplo de que cuando algo te apasiona nada ni nadie debería apartate de ello. La pasión de Aitor Romero (Ávila, 1980) desde siempre fue el dibujo. Por eso recuerda como algo «surrealista» situaciones que vivió de pequeño, como cuando recibía constantemente mensajes que le decían que debía apartarse de él. «En el colegio no se fomentaba para nada la faceta artística», lamenta ahora Aitor que, a los 16 años, abandonó los estudios soñando con poder desarrollar esa faceta, aunque tardaría aún un poco en descubrir que él mismo terminaría plasmando su arte sobre la piel de las personas. 

Porque Aitor es tatuador.Desde su estudio Black Sunrise Tatoo and Piercing (en la avenida de Madrid, en Ávila, y en la calle SanFrancisco, en Segovia) convierte en realidad los deseos de gente de todas las edades y condiciones. Y él, disfruta. Ha encontrado su pasión y eso se nota a la hora de hablar con él, que recuerda para Diario de Ávila cómo dio sus primeros pasos en este mundo.

Al mundo de las agujas y la tinta llegó de la mano de los piercing. «Es que al principio el tema de los tatus me daba pánico, por si la liaba, no me veía con una buena base de dibujo»,  reconoce con humildad Aitor, que por aquella época ya hacía sus pinitos en el mundo del grafiti.

Así que dedicó los últimos años de los 90 a trabajar en distintos sitios haciendo perforaciones, pero aún sin lanzarse al mundo del tatuaje. Y fue en el año 2004, después de distintos trabajos y con apenas 23 años, cuando finalmente se lanzó a montar su primer estudio, en la vecina ciudad de Segovia, desde donde terminó dando el salto también a Ávila.

¿Qué es lo primero que le viene a la cabeza sobre Ávila?

Lo bonita que es la ciudad. La infancia con mis amigos.Los paseos en bici. Ir al parque...

¿Que es lo que más le gusta de vivir en Ávila?

Pues que es una ciduad preciosa, con unas vistas excepcionales. Es una ciudad que es una maravilla.

¿Y lo que menos?

Que está muy apagada como ciudad. No tiene gente, no hay alegría, no hay vida.

Un lugar para perderse…

¡Todos! En cualquier sitio me puedo perder porque todos me encantan. Ávila tiene tantas cosas bonitas...

Un recuerdo de la infancia…

El barrio de Las Vacas.

Un personaje abulense que le haya marcado.

Pues voy a decir dos: Julio, mi profesor de Lengua en el Centro de Educación de Adultos, y David Castro, fotógrafo de Diario de Ávila. Es como mi hermano.

El mayor cambio que necesita Ávila ...

Transporte, para que pueda llegar la gente.

Y Ávila tiene que mantener…

La belleza que tiene, que es una maravilla.

¿Qué le parece la ciudad hoy día?

Que está abandonada para la gente joven, para que puedan hacer cosas, emprender...

¿Cómo ve Ávila en el futuro?

No lo te lo puedo decir, porque no me planteo el futuro. Sólo me planteo el presente.

¿Qué puede aportar a la provincia de Ávila?

¡Alegría! Y, por supuesto, mi trabajo.

Lea la entrevista completa en la edición impresa de Diario de Ávila.