La Diputación de Ávila en el marco del programa FIREPOCTEP  ha adquirido (cofinanciado al 75%) cinco mini estaciones meteorológicas que, instaladas en sus vehículos de emergencias, o de intervención rápida, permitirán afrontar de mejor modo los incendios forestales ya que con ello tendrán de manera inmediata los datos sobre la velocidad o la dirección del viento y su intensidad así como el grado de humedad o la temperatura en la zona afectada por un fuego.

De todo ello daba detalle el diputado de consorcios, José Luis del Nogal, quien explicaba que se trata de los vehículos que tiene repartidos Diputación por los pueblos de la provincia y «con estas estaciones se nos va a permitir tener datos en tiempo real de la evolución del incendio».

Hasta ahora lo que se hacía era coger los datos de las estaciones meteorológicas cercanas, pero esa cercanía en ocasiones distaba del punto del incendio hasta 20 kilómetros con lo que es una mejora necesaria. Con esto «lo que intentamos es poder tener muy clara la evolución de ese incendio forestal  y de esta forma estamos preparados y prevenidos en esos lugares donde pudiera afectar en mayor medida».

Como decíamos son cinco estaciones que ya están instaladas en los vehículos y forman parte de ese proyecto europeo del que es socio la Diputación junto con otras administraciones de Portugal así como la Junta de Andalucía, que es quien lidera el proyecto.

«Todo lo que sea trabajar en este sentido es fundamental», finalizó Del Nogal su intervención.

Por su parte Alberto López Casillas, técnico de Diputación manifestaba que la intención última es fortalecer los sistemas de prevención de incendios forestales en este caso en la zona de la frontera.

Son más actuaciones, pero concretamente ésta lo que va a permitir es mejorar las posibilidades de  modulación de los incendios durante la extinción, con una recogida de datos mucho más fiables y pegada al terreno. Por eso, aseguraba «vamos a mejorar en esa modulación y por tanto en la capacidad de extinción y en la protección de los medios que participan en los incendios», tenía claro. Al tiempo apuntaba que el reto es obtener los datos y hacerlos compatibles con las plataformas que utiliza la Junta de Castilla y León que es quien tiene competencias en materia de extinción y, a la vez, trabajar en paralelo con el proyecto TREEADS. Y es que a pesar de ser dos iniciativas diferentes trabajan en cuestiones similares y ésas no son otras que el fuego, la prevención y su extinción.

La diferencia es que la segunda tiene mayor número de socios: casi medio centenar de toda Europa.

En cuanto al uso de las estaciones meteorológicas recordaba Alberto López que era requisito en el contrato para su adquisición que los datos fueran abiertos y poderlos usar, con las adaptaciones necesarias, en las diferentes plataformas.

Ese contrato, dotado con 25.000 euros contemplaba estas cinco estaciones y las otras cuatro «más complejas» que se instalarán en diferentes bosques de la geografía abulense y que «incluyen un sensor especial para la medición de la humedad del terreno en cuatro bosques piloto».