Noviazgo eterno con Venecia

Gonzalo Sánchez (EFE)
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Almodóvar aspira al anhelado León de Oro con 'Madres paralelas', un drama sobre la maternidad de dos mujeres que inaugurará la Mostra

Amor incondicional. Eso es lo que siente Pedro Almodóvar por el Festival de Venecia. Una circunstancia que se ha hecho evidente en los últimos tiempos y que este año se renovará con el estreno de Madres paralelas, un drama de dos mujeres que dan a luz el mismo día y que servirá de apertura al certamen. Además, el cineasta aspirará  con esta cinta protagonizada por Penélope Cruz, Milena Smit, Israel Elejalde y Aitana Sánchez-Gijón al anhelado León de Oro.

La Mostra pretende volver este año por todo lo alto tras la pasada edición, aguada por la pandemia, y para ello ha elegido la película del manchego para su inauguración el próximo 1 de septiembre.

Almodóvar ha acogido esta noticia con entusiasmo pues, para él, Venecia no es un festival cualquiera, es el lugar en el que «nació» como cineasta con Entre tinieblas (1983).

El español volvió un lustro después con su película más aclamada, Mujeres al borde de un ataque de nervios (1988), conquistando el Premio al Mejor Guión.

Tuvieron que pasar muchos años, tres décadas, para que Almodóvar recibiera el León de Oro honorífico, en 2019, un reconocimiento que acogió como «un hecho de justicia poética» pues curiosamente la estatuilla aún no decoraba su oscarizado palmarés.

El certamen italiano encumbraba así al «más grande e influyente» cineasta español desde Luis Buñuel, pero este a su vez reconocía que le gustaría ganar la Mostra con una de sus películas.

Y el manchego supo devolver el aprecio en el año más difícil para el festival, el de la pandemia, al elegirlo para el estreno de su primer corto, The human voice, regalándole uno de los momentos más sobresalientes de esa edición.

quitarse la espinita. Ahora, Almodóvar podrá quitarse la espina y lograr un León de Oro con Madres paralelas, su esperado último trabajo que ya ha recibido los elogios del director de la Mostra, Alberto Barbera, para quien es «un privilegio» tenerle en competición.

Se trata de «un retrato intenso y sensible de dos mujeres que se miden con los temas de una maternidad con dobleces impredecibles».

Pero también habla de cuestiones en el candelero actual, como la solidaridad femenina o de una sexualidad plenamente libre y lejos  y lejos de hipocresías.