El trasiego de maletas y de turistas en los hoteles de Ávila estos días es por fin similar al de una Semana Santa normal, antes de que la pandemia trastocara todos los planes y dejara las habitaciones vacías en plena temporada alta durante dos años seguidos porque aún el pasado año las restricciones impidieron la celebración de las procesiones y eso condicionó la enorme afluencia de visitantes propia de los días de Pasión. Sin embargo, la actividad ayer en las recepciones de los hoteles era incesante, atendiendo la llegada de clientes, facilitando información práctica a los que ya estaban alojados y todo ello sin dejar que el teléfono sonara más de lo aconsejable.
En la calle, a lo largo del Jueves Santo el centro histórico fue un auténtico hervidero de turistas dispuestos a disfrutar de los atractivos monumentales de una Ciudad Patrimonio de la Humanidad como Ávila cuya Semana Santa cuenta, además, con la Declaración de Interés Turístico Internacional. El sol y las buenas temperaturas también contribuyeron a animar tanto las calles de casco antiguo como la Ronda a la Muralla, repleta de visitantes captando esa panorámica tan típica de Ávila, ya vestida con las flores de la primavera sobre el manto de hierba verde en el que alguno acabó incluso echándose la siesta. Las terrazas de bares y restaurantes también estuvieron muy concurridas durante toda la jornada, incluso con varios turnos para comer en algunos de los establecimientos del centro que se encuentran más a pie de calle, donde los camareros tuvieron que emplearse a fondo.
Y es que esta Semana Santa los principales establecimientos hosteleros de la capital abulense están completos, principalmente el Jueves y el Viernes Santo, días para los que la ocupación está al 100%, según la información que ha recabado esta Redacción. En algunos de ellos para el sábado hay todavía alguna habitación libre, pero confían en que acaben ocupándose con reservas de última hora. Así sucede, por ejemplo, en el Hotel Exe Reina Isabel, donde para el jueves y el viernes tienen colgado el cartel de 'completo' y para el sábado están al 80% de ocupación. «Es la primera Semana Santa normal en dos años, estamos contentos con la respuesta de los clientes», nos comentaban en la recepción.
Lleno en los hoteles en la primera Semana Santa post-covid - Foto: David Castroen el centro histórico. Si nos vamos al centro histórico, en el Hotel Valderrábanos ya el Miércoles Santo estuvieron al 98%, mientras que el resto de los días están a tope, principalmente turismo nacional, con procedencias diversas pero con la presencia siempre dominante de quienes viajan desde la Comunidad de Madrid, aunque también pernoctan en sus habitaciones estos días visitantes de otros puntos del país, como «Levante y País Vasco», nos cuentan desde este histórico hotel abulense uno de cuyos encantos es su posición estratégica frente a la Catedral, lo que permite a algunos de sus clientes tener una vista privilegiada de la salida y llegada de las procesiones que tienen como punto central el primer templo abulense, tal es el caso de Los Pasos o la Pasión y el Santo Entierro que salen en Jueves Santo y Viernes Santo, respectivamente.
Lo mismo ocurre en Velada Hoteles, cuyos balcones que dan a la plaza de la Catedral brindan a sus clientes la oportunidad de admirar las estaciones de penitencia desde una posición estratégica. Allí, además del turismo nacional propio de la Semana Santa que proviene sobre todo de la Comunidad de Madrid, Cataluña, Andalucía y País Vasco, tienen también clientes procedentes principalmente de Alemania y Francia. En esta ocasión, quienes tenían previsto viajar a Ávila en Semana Santa no han esperado a última hora en absoluto. «Hace tiempo que el hotel está completo para estos días, la gente lo ha planificado con antelación, se nota que había ganas de salir por fin», indican desde Velada Hoteles, que pese a la satisfacción que supone este retorno a la normalidad siguen echando de menos los grupos turísticos. «Aún está flojo, ya se nota algún grupo, pero los pocos que hay son pequeños», revela.
Muy cerca de allí, también en pleno centro histórico de Ávila, el Hotel Las Moradas se encuentra también al 100% de ocupación. «Tenemos de todo: familias, parejas, grupos de amigos, también personas solas, ...».
Desde el Hotel Cuatro Postes, Piedad Sánchez, que a su vez es la presidenta de la Asociación de Hoteles de Castilla y León, sitúa en la Semana Santa el «punto de inflexión para el comienzo de la temporada» y el hecho de que la respuesta de los clientes tras dos años de pandemia esté siendo tan buena lleva a que el sector lo esté viviendo «con alegría», sobre todo teniendo en cuenta lo mal que se ha pasado en estos dos años. «Nos agrada ver gente en la calle viendo las procesiones y que todos volvamos a vivir la Semana Santa con una normalidad tan deseada», subraya.
Ella deja bien claro que se trata de un «punto de partida» porque en Semana Santa «toda la demanda se concentra en cuatro días», pero arrancar con buen pie la temporada turística es importante. También lo es el hecho de que «el turismo extranjero se empiece a mover», aunque de momento apenas llegue a «las ciudades más conocidas», apunta.
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