El punto limpio de Ávila superó por segundo año desde su puesta en marcha los 16.000 usuarios. Esto sucedió durante 2022, al igual que había pasado un año antes, aunque es cierto que en el último hubo un pequeño descenso al pasar de 16.420 a 16.069 usuarios, es decir, un dos por ciento menos.

De todas formas, se ve que se sigue la tendencia de aumento de uso que se viene registrando en este espacio en los últimos años. Es más, en la última década son más de 121.000 las personas que hicieron uso de esta infraestructura municipal para la gestión de residuos de origen domiciliario que no tienen cabida, de forma general, en los contenedores ordinarios de recogida que están instalados en la vía pública. Esto supone que al punto limpio se pueden llevar desde bombillas, pinturas o baterías hasta colchones, filtros, muebles, electrodomésticos, escombros o pilas.

En la evolución del uso de este servicio, se ve que en el año 2000 fueron 2.100 los usuarios que lo utilizaron. A partir de ahí, el uso fue creciendo año a año hasta llegar a un primer pico, en 2010, cuando se quedó cerca de los 14.500 usuarios. Sin embargo, desde ese momento comenzó una importante bajada que hizo que el uso fuera cada vez menor hasta el mínimo de 2014, cuando se superaron por poco los 9.000 usuarios. De nuevo, desde ese año comenzó a subir la utilización, alcanzándose las cifras más altas en 2021 y 2022, superando en ambos años los 16.000 usuarios.

Respecto a los datos del último año, los meses en los que hubo un mayor uso fue en los comprendidos entre mayo y septiembre, precisamente el tiempo en que las temperaturas están más elevadas. De este periodo, cuando más usuarios se registraron fue en agosto, casi con 1.900. El menor uso se sitúa, por el contrario, en abril, con 1.113 personas que acudieron a este espacio.

En los hábitos de uso destaca que cuando más se acude son los martes, con casi 3.000 personas a lo largo del año y, en cuanto al horario, el momento preferido es entre las 12,00 y las 13,00 horas, con casi 3.400 personas que fueron en 2022. Poco  uso hay, como es lógico, los domingos y en las horas de al mediodía.

Hay que tener en cuenta que el punto limpio es una infraestructura que está abierta para que puedan dejar los residuos los particulares. Ellos pueden acceder a una instalación cerrada y vigilada para la recogida selectiva. Se trata de un punto de aportación voluntaria de residuos, a través del que se asegura la gestión adecuada de los mismos según sus características o materiales de composición, y se garantiza un tratamiento ambientalmente correcto de todos ellos.

Al punto limpio se puede acceder tanto andando como en vehículo particular para ser recibido por el operario de la instalación, que se encarga de informar y ayudar a depositar correctamente el residuo en el lugar adecuado, para lo cual se cuentan con espacios concretos, identificados mediante señalización vertical. El depósito de los residuos es gratuito.

tipos de residuos. Según el tipo de residuo que se deposite en el punto limpio, se mide en kilos, unidades o incluso litros. En el primer caso, el mayor uso el pasado año fue para los escombros, con más de 206.000 kilos, pero también destacan los casi 100.000 de maderas. En los elementos que van en unidades, se superaron las 98.000 pilas (no botón) y hubo 17.538 unidades en la categoría de 'otros electrodomésticos', sin contar con lavadoras (164) o frigoríficos (386). Además, en cuanto a los litros, destacan los aceites vegetales o de automoción.

No se hizo uso del punto limpio para somieres, embalajes de cartón, puertas o marcos, pilas de botón, aluminio, acero inoxidable o envases plásticos de gran capacidad.