Arte y vida bajo teja en San Lorenzo de Tormes

Mayte Rodríguez
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Este festival pretende «revitalizar nuestros pueblos mediante la creación artística en el medio rural» y cuyas actividades han puesto en primer plano a los vecinos y a sus vivencias, además de música y divertimento colectivo

Arte y vida bajo teja en San Lorenzo de Tormes

Este domingo concluye el Festival Bajo Teja que ha venido celebrándose en San Lorenzo de Tormes, un pequeño pueblo cercano a El Barco de Ávila cuyo tamaño no ha sido impedimento para que durante unos días el arte y la vida en el medio rural se den la mano, siempre desde el respeto a la identidad del lugar y de sus vecinos, que es el espíritu de esta iniciativa que gira en torno a la convivencia de los artistas y de los vecinos.

Y así han transcurrido estos días, entre la «emoción, la alegría y la participación» que han marcado las diferentes actividades realizadas. Entre ellas, la denominada 'Recetas para la vida', que vuelve hoy domingo y a través de la cual se han puesto en común historias y emociones de los vecinos, «esas que nunca cuentan porque parece que no son importantes, pero esas son las verdaderamente importantes en este taller», apuntan desde la organización.

Otra de las actividades desarrolladas, llamada 'Estación recuerdo', «permite a los visitantes recuperar sus vivencias al hielo de las que se ofrecen en un recorrido que se realiza en distintas estaciones» que constituyen rincones especiales de San Lorenzo de Tormes.

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También tuvo lugar la proyección del documental 'Folk, una mirada a la música tradicional', que repasa lo mejor del folklore de Castilla y León, que incluye las opiniones de figuras tan representativas como el músico e investigador Joaquín Díaz o uno de los fundadores de Celtas Cortos, Carlos Soto. En el Festival Bajo Teja tampoco faltó la música en directo, con el concierto del dúo Ombligo, que abrió el evento con su música instrumental y cuyos integrantes conectaron enseguida con el público a través de la guitarra, el violín y el silbido como un instrumento más.  La jornada del sábado se cerró con el concierto de Moure&Durán después de que entre las actividades llevadas a cabo destacara un filandón, una reunión de vecinos en la que ellos mismos recordaron historias del pueblo, cuentos, leyendas o, simplemente, intercambiaron pareceres sobre su pueblo. Porque la idea de este evento es precisamente esa: «repensarnos y revitalizar nuestros pueblos» mediante la «creación artística en el medio rural», nos cuentan.