El Mercado Medieval de Ávila, que este año alcanza su vigésimo quinta edición y que se desarrollará del 2 al 4 de septiembre, contará en esta ocasión con un operativo de 250 personas integrado por efectivos de Protección Civil, Bomberos, Policía Local y Nacional, así como por personal de la organización, que velarán por la seguridad de quienes durante estas tres jornadas participen en este evento turístico.  

De hecho, desde el Ayuntamiento se calcula que entre el viernes y el domingo visiten el Mercado Medieval de Ávila más de 100.000 personas, como apuntó el alcalde, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, que recordó que el año pasado, aún con restricciones derivadas de la pandemia, este evento atrajo a unos 80.000 visitantes. 

Dentro de este operativo de seguridad un papel destacado tendrán los cinco puestos de Protección Civil que se instalarán por el Mercado Medieval, entre ellos el situado en la plaza de la Catedral que este miércoles visitó el alcalde que apuntó que el objetivo es «garantizar la seguridad de todo aquel que nos visite» y que con esa intención  «vamos a trabajar todos juntos, coordinadamente, todas las administraciones». 

Como novedad este año, el dispositivo de seguridad contará con  doce nuevos desfibriladores semiautomáticos que estarán en los distintos puestos de mando de Protección Civil para atender posibles paradas cardiacas, algo que ya ha ocurrido en otras ediciones. Además, una vez finalice el Mercado Medieval estos desfibriladores se distribuirán entre los servicios municipales de Policía Local, Bomberos y Protección Civil «de tal manera que podamos ayudar en cualquier situación» y que Ávila se convierta también en «una ciudad cardioprotegida», como apuntó el regidor. 

«La experiencia nos dice que cuanto antes llegue el desfibrilador semiautomático la supervivencia aumenta, hasta el 90 por ciento si llega en el primer minuto», apuntó Fernando Nieto, responsable de Protección Civil, que señaló que cada año, y de media, durante este fin de semana se producen siete emergencias sanitarias de verdad, tales como infartos, síndromes coronarios agudos, ictus, síncopes con alguna cardiopatía si bien el grueso de los servicios sanitarias que prestan durante el Mercado Medieval tienen que ver con heridas, traumatismos, esguinces y mareos.

Los desfibriladores estarán distribuidos en los puestos de mando de la Plaza de la Catedral, el Mercado Grande, las plazas del Rastro y Zurraquín, en el jardín de San Vicente y en el atrio de San Isidro durante los diferentes espectáculos así como en los diferentes vehículos de intervención rápida. 

Además, y en una medida que «ha funcionado muy bien en anteriores ediciones», este año también en los puestos de Protección Civil del Mercado Medieval se distribuirán pulseras para identificación de menores, de modo que en el caso de pérdida se pueda localizar a sus padres «rápidamente», afirmó Sánchez Cabrera.  

Policía Local y Nacional también participarán en este operativo que también implica medidas de tráfico y de policía administrativa, en este caso con tareas realizadas de forma previa de cara a la distribución de los puestos y terrazas y con el fin de facilitar espacios abiertos y evitar incidencias «ante la previsión de una afluencia muy numerosa de público», como apuntó José Miguel Jiménez, jefe de la Policía Local. 

Por su parte, Policía Nacional aparte de realizar labores de seguridad ciudadana también incorporará a este dispositivo efectivos de policía judicial sobre todo de cara a actuaciones de carteristas o hurtos y también la brigada de información en este caso de cara a prevenir actos terroristas teniendo en cuenta que nuestro país continúa en nivel 4 de alerta terrorista, como recordó el inspector jefe de Seguridad Ciudadana, José María García. Por su parte, y de cara a este evento, Bomberos implementará el personal durante estos días, con quince efectivos en cada una de las jornadas, de los cuales una dotación de cuatro efectivos estará dentro de la Muralla y otra de tres fuera, mientas que el resto de personal se quedará en el parque «para poder atender las emergencias que puedan surgir en Ávila y provincia», como explicó el sargento de Bomberos José Miguel Álvarez.