«Facilitar la movilidad urbana sostenible para todos los vecinos de la ciudad de Ávila, de tal manera que vayamos dejando un lado el transporte con vehículos y avancemos con el transporte en bicicleta para mejorar la sostenibilidad ambiental de nuestro municipio, tengamos una ciudad más verde y dejemos de emitir CO2 a la atmósfera», es el objetivo con el que el alcalde de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, ha presentado «el primer carril bici interurbano de la ciudad de Ávila», cuyos trabajos ya han comenzado a desarrollarse en algunos de los ocho tramos en los que se divide esta nueva infraestructura para la capital abulense.

El alcalde destacó que «con este carril bici contribuimos al objetivo de un desarrollo urbano sostenible que tiene Ávila, a mejorar la ciudad, a hacerla más habitable y facilitar la vida a los abulenses. Queremos que sea una ciudad más amable, es el compromiso que tenemos para todo el mandato y la verdad es que lo estamos consiguiendo». Además, destacó el hecho de que este nuevo servicio para la ciudad «también mejora la seguridad de los ciclistas cuando transitan por nuestras calles».

Con un presupuesto de 807.963,05 euros, cofinanciados por el Feder en un 50 por ciento, dentro del Programa Operativo Plurirregional de España 2014-2020 a través de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi) de Ávila y con fondos europeos procedentes del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, el carril bici unirá el centro medioambiental San Nicolás con el carril bici existente hasta el complejo Naturávila con un recorrido cercano a los 4 kilómetros.

diferentes tramos. Sánchez Cabrera ha visitado en la avenida Juan Pablo II las intervenciones que se están realizando de forma paralela en varios tramos: además de en esta calle, en la avenida de la Juventud y también en Agustín Rodríguez Sahagún, y es que «se está trabajando en varios tramos, con las diferentes características de cada uno», comentó el alcalde, quien informó que «en total con ocho tramos», con los que se conectará la senda existente en la margen derecha del río Adaja por la avenida Juan Pablo II con Agustín Rodríguez Sahagún, hasta Camino del Gansino y, desde aquí, enlazar con el carril bici existente hacia el complejo Naturávila.

La estrategia para incorporar el carril-bici a las infraestructuras existentes será realizar el mínimo impacto al tráfico rodado y peatonal, con un ancho del carril de 2,50 metros en el caso de vías de doble sentido y de 1,50 metros si es de sentido único para hacerlo seguro y atractivo a los nuevos usuarios. También prevé la construcción de diferentes aparcabicis, todo ello con la intención de «invadir lo menos posible las aceras, las zonas de vehículos motorizados y también los aparcamientos, para intentar convivir y de esta manera poco a poco podamos ir dejando a un lado los vehículos».

Para la realización de las obras «ha habido tramos en los que ha sido necesario el quitar árboles, y se han transplantado a zonas verdes cercanas, siempre mirando desde el punto de vista de la sostenibilidad ambiental de la ciudad».